La madrugada del 18-19 de Agosto de 1936, criminales franquistas Asesinaron en Caparroso (Navarra) a 4 Republicanos de Peralta y 7 de Murillo el Cuende
La madrugada del 18-19 de Agosto de 1936, criminales franquistas Asesinaron en Caparroso (Navarra) a 4 Republicanos de Peralta y 7 de Murillo el Cuende / Tulio Riomesta

 

En varias localidades de la ribera Navarra la conflictividad social entorno a la tierra impulsó el desarrollo de núcleos socialistas. La guardia civil los tenían enfilados por la cuestión comunera, la recuperación de las tierras comunales que los caciques derechistas se habían apropiado de forma sistemática e ilegal durante años. Era un motivo de enfrentamientos entre la población jornalera que durante siglos vivía de utilizar comunalmente esas tierras, y los terratenientes y sus lacayos armados, la guardia civil «al servicio de la justicia y el orden, postulados de la bandera del glorioso alzamiento nazional».

Los guardias denunciaban a los votantes de izquierda, acusados de «arrastrar a familiares, amistades y conocidos por malos caminos político-sociales y religiosos inculcando en sus hijos ideas revolucionarias». Los fascistas no estaban dispuestos a permitir que las reivindicaciones de los trabajadores de la tierra se materializaran de ninguna manera, y de ahí el exterminio por toda la ribera Navarra de cientos de jornaleros Republicanos de familias humildes. La madrugada del 18-19 de Agosto de 1936, los fascistas asesinaron en Caparroso a 12 vecinos de Santacara. No fueron los únicos, en esa misma fecha, se hizo en Peralta una «saca» de 4 Republicanos, que fueron cruelmente torturados, auténticas atrocidades. Los llevaron a las Planillas de Caparroso, y allí los asesinaron. Al día siguiente varias vecinas de Caparroso los cubrieron con sábanas antes de enterrarlos en una fosa común del cementerio. Dos de ellas eran familia de 2 de los asesinados. Igualmente otros 7 Republicanos de Murillo el Cuende (Navarra) fueron asesinados en ese lugar. Los 4 Republicanos de Peralta asesinados en Caparroso fueron:

José Legaz Silvestre, 36 años, natural y vecino de Peralta, hijo de Román y María Silvestre. Afiliado a UGT. Le llamaban “Legaz Cojo”, era paralítico. Por ser inválido fue llevado a rastras, mientras su madre iba detrás profiriendo gritos desgarradores. Tuvieron que matarlo en el suelo. Leía mucho el periódico y con la filarmónica le gustaba mucho tocar las marchas socialistas. Esteban Osés Arbeloa, 28 o 30 años, natural de Lodosa y vecino de Peralta. Era jornalero de CNT o UGT. Casado con Pilar Romero, tenían una hija, Amelia. Se implicó mucho en la lucha por las tierras comunales, era una gran persona. Serio y responsable, al tiempo que cariñoso. Cuando un vecino fue a su casa a matarle su esposa le dijo: «¿Tú vienes a matar a mi marido, cómo tienes valor?». 

Julián Pérez Osés, ”Primo”, 36 años, natural y vecino de Peralta. Hijo de Primo y Aniceta. Era labrador, con inclinaciones socialistas. Un vecino le delató al párroco: «No he visto en mi vida echar más disparates que a Pérez». Fueron a por él y un vecino se encargó de matarle, en Caparroso “a consecuencia del “glorioso movimiento nazional”. Comentaron que “Se ha quedáu en Caparroso, porque tiene allí a una hermana y lo recogieron”. 

Ricardo Zabal Taninez, «Vinorria tigre”, 34 años, natural y vecino de Peralta. Jornalero de UGT. Casado con Matilde Boneta Campo, tenían 2 hijas, Amelia y Blanca. A Matilde la mataron el marido, el padre y un hermano. A Ricardo no les bastó con matarlo en Caparroso. Se ensañaron con él sacándole los ojos y, como al resto del grupo, le cortaron las orejas. Una prima carnal de Matilde, que vivía en Caparroso, y otra prima de Estebán Osés, junto con 2 o 3 personas más, acudieron al cementerio al saber que eran de Peralta y llevaron unas sábanas para encolverles antes de enterrarles, y se encontraron con todo esto.

El 18 de agosto los rebeldes franquistas detuvieron a 8 Republicanos naturales y vecinos de Murillo el Cuende. Los ataron con cuerdas de segadora, y los subieron a un camión. Uno de los detenidos, Antonio Adot Aguirre, logró saltar del vehículo y fue el único que se libró. A los otros 7 los fusilaron esa madrugada en Caparroso, cerca de la Ermita de la Virgen del Soto, en la carretera del soto a Marcilla. Las víctimas fueron: 

Bienvenido Sagardoy Nicolás, 46 años, hijo de Gabino y Salomé. Era labrador y teniente de alcalde, afiliado a UGT. Casado con Crescencia Aguirre Sarrías, tenían 2 hijos. Crisanto Irigoyen Ongay, 25 años, hijo de Venancio y Melchora. Era Labrador y de Izquierdas. Isidoro Azcoiti Díez, 26 años, hijo de Martín y Gertrudis. Jornalero de UGT. 

Miguel Amadoz Díez, 54 años, hijo de Rafael y Micaela, Labrador, casado con María Abaurrea Garayoa, tenían 11 hijos. En febrero de 1933 Miguel acudió como delegado al Congreso Provincial de UGT: La Casa del Pueblo de Murillo nació a la par, era el único local Republicano del pueblo. Los informes franquistas sobre Miguel Amadoz eran muy negativos: provocador, extremista, mala conducta pública y privada, «terrible propagandista», fundador y presidente de la UGT. 

– Con Miguel Amadoz mataron en Caparroso a uno de sus hijos, Vicente Amadoz Abaurrea, 22 años, Labrador afiliado a las Juventudes Socialistas. Otro afiliado a las JS, también asesinado en Caparroso con los anteriores fue Suceso Lacasta Aguirre, 20 años, hijo de Evaristo y Andresa. 

-La 7ª víctima fue Victoriano Aguirre Maestrojuan, 45 años, hijo de Bartolomé y Juliana. Casado con Teodosia Sagardoy Nicolay, tenían 2 hijos. Era jornalero, alguacil y guarda temporero en tiempo de la uva. Afiliado a UGT.

Documentos: 15 mpedia (Caparroso, Peralta, Murillo el Cuende). Espacios de Memoria. Orreaga Fundazioa. Fondo Documental de la Memoria Histórica en Navarra. Oroibidea, Camino de Memoria


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