Cuando las tropas sublevadas del ejército de Yagüe ocuparon la ciudad, custodiada por milicias leales a la república, saquearon y castigaron a todo aquel sospechoso de no haber apoyado la cruzada fascista. Bastaba un moratón en el hombro, la denuncia anónima de un vecino, el asalto a una vivienda. Cientos de vecinos y vecinas arrancados de sus hogares fueron fusilados y torturados junto a la catedral, en la antigua plaza de toros o en las tapias del cementerio.
Un día como este, 88 años más tarde, la Plataforma Agosto Antifascista, llamamos al recuerdo de nuestro pueblo doblemente castigado: primero con el exterminio de la guerra, y luego con la desaparición de lo ocurrido en la memoria oficial durante la dictadura. Es deber de todo demócrata rendir homenaje a todos aquellos antifascistas con los que nuestro país tiene una deuda pendiente. Luchadores por la democracia, por la libertad y por la emancipación de todo individuo independientemente de su nación, sexo, religión, raza, etc. También hacia esas víctimas anónimas de la guerra, a quienes no preguntaron, sino simplemente castigaron para que sirvieran de ejemplo, propagando el miedo y terror.
No hay olvido ni perdón para los autores y responsables de los asesinatos en masa perpetrados en la ciudad tras su asedio. Reclamamos verdad, justicia y reparación. Verdad, en cuanto que se tenga conocimiento del número de víctimas y responsables del conflicto. Justicia, en tanto que las familias vean saldada la deuda que éste régimen aún tiene con las víctimas del franquismo y vean cumplido su derecho a ver juzgados a los responsables de la matanza, aunque solo sea en la historia, visto cómo pasan los años y los responsables por ellos muriendo en la cama.
Por último, reparación, en tanto que se realicen todas las acciones pertinentes para mitigar los daños infringidos a las víctimas en lo relativo a la violación de los derechos humanos, en todos los niveles que sean necesarios: Apertura de fosas, cumplimiento y respeto del derecho de las víctimas a conocer el paradero de sus familiares. Garantía de no repetición (mediante la prevención), dando exposición y reprobación pública en todos los niveles de la sociedad extremeña y pacense de los hechos ocurridos en la ciudad durante los días 14 y 15 de agosto. Así como la retirada de toda simbología que ensalce la sublevación militar y la dictadura franquista.
Por todo ello, convocamos una manifestación que se realizará el 14 de agosto a las 20.30 horas con salida desde Puerta Trinidad (junto al puente de San Roque) y finalizará en la antigua Plaza de Toros, actualmente el Palacio de Congresos. Al mismo tiempo se convoca a la 10.00 del día 15 de agosto, concentración en el Cementerio de San Juan Bautista, donde se llevará a cabo un acto de homenaje a las personas asesinadas y represaliadas por el golpe militar de 1936.
Fuente → kaosenlared.net
No hay comentarios
Publicar un comentario