El antiguo campo de concentración de Arnao, en Castropol (Asturias), se convertirá en un Lugar de la Memoria

El antiguo campo de concentración de Arnao, en Castropol (Asturias), se convertirá en un Lugar de la Memoria 

El proyecto incluye la construcción de una escultura conmemorativa.

Entre 1937 y 1942 más de 2.000 personas estuvieron presas en el campo de concentración de Arnao, convertido ahora en área recreativa. El Ayuntamiento de Castropol, ocupado desde hace años en la dignificación de este lugar, busca ahora su reconocimiento como Lugar de la Memoria.

Una iniciativa que cuenta con la colaboración del Principado. Una más de las actuaciones de memoria democrática en esta legislatura. Una iniciativa que se pretende trasladar a otros lugares de la región.

Se instalará una escultura que, se pretende, sea una realidad este mismo año.

Finalizadas las operaciones en Asturias, entre los meses de septiembre y diciembre de 1938 se levanta en Arnao (Figueras-Castropol) un campo de concentración de Prisioneros de Guerra, dependiente de la Inspección General de Campos de Concentración y más tarde de la Columna de Operaciones de Asturias (COA). Las fuerzas de guarnición en este campo tenían a su cuidado, además de las labores propias de vigilancia, la defensa de la costa y de la Ría del Eo. Para albergar a los prisioneros, se construyeron tres barracones o galpones de madera, que albergaban cada uno unas 300 personas, dispuestas en literas de tres pisos de a cien personas cada galpón. Cada barracón medía 32 m. de largo por 10,70 de ancho. Estaban pintados de color gris oscuro. Entre los barracones había una caseta, también de madera, de 6,50 x 5,20 m., así como un subterráneo destinado a almacén de víveres. Más tarde se construyó un nuevo barracón para albergar a las fuerzas de guarnición, compuestas por una Compañía al completo. Además, fuera ya del conjunto anterior, había otro barracón dedicado a enfermería con capacidad para 27 camas. Existía, además, una casa que hacia las veces de oficina administrativa y vivienda de oficiales, una garita de guardia, una fuente de agua potable, construyéndose posteriormente otra casa destinada a cocinas.

Todo ello fue construido por los propios prisioneros. Todo el conjunto del campo estaba cercado con alambre de espino, así como una serie de de fortificaciones ligeras de campaña para facilitar su defensa. En el mes de junio de 1943 se levanta el campo y se desarman los barracones de madera. No hace muchos años aún permanecía en pie, sin marcos, puertas y ventanas, uno de los edificios de mampostería y un precioso banco de cemento en la zona dedicada al esparcimiento de la guarnición, cuyas obras desaparecieron con la construcción del Puente de los Santos. Todavía son testigos visibles, empero, los magníficos caminos de comunicación, construidos con piedra rota "a porrillo" por los propios prisioneros. Relativamente cerca del campo, en la estratégica posición de Punta de la Cruz, que dominaba la boca de la Ría, en diciembre de 1936 se emplazó una pieza antiaérea de marina del ¿calibre 10?, de plataforma fija con rodillos giratorios. En sus inmediaciones, en el lugar conocido como Yán, se construyó un polvorín y una caserna de ladrillo para albergar a los servidores de la pieza. Estos los constituían un contramaestre (jefe), un cabo tirador, un altimetrista y cuatro sirvientes de pieza. La única actividad desplegada por esta pieza fue contribuir, junto con un buen artillado, al bombardeo de un avión enemigo. En el primer trimestre de 1938 la pieza fue retirada de su emplazamiento.

Más información: El campo de concentración de Arnao (Castropol-Figueras)


banner distribuidora