Con el POUM. Voluntarios internacionales en el Frente de Aragón (1936-1937) (2018) / Andy Durgan

 

• Resumen
• Introducción
• El grupo internacional
• Los voluntarios
• La División Lenin
• Orwell y el contingente de la ILP
• El batallón de choque
• La 29ª División
• Represión y contrarrevolución
• La lucha continúa

Resumen

Aunque la historia de las Brigadas Internacionales está bien documentada, se sabe poco sobre los cientos de voluntarios extranjeros que lucharon con las milicias obreras. Este artículo ofrece una visión general de los orígenes y las características de los cerca de seiscientos milicianos internacionales que lucharon con el POUM en el frente de Aragón durante los primeros diez meses de la Guerra Civil. Contrasta su experiencia con la visión ofrecida en el Homenaje a Cataluña de George Orwel, analizando tanto su papel militar como su posterior destino una vez que el POUM fue ilegalizado en junio de 1937 y sus milicias se disolvieron. Calumniados como «agentes fascistas», decenas de estos voluntarios extranjeros fueron detenidos. Sin embargo, otros seguirían luchando en otras unidades, incluidas las Brigadas Internacionales. Por último, el artículo examina el destino de algunos de estos voluntarios como combatientes y víctimas en la Segunda Guerra Mundial.

Introducción

Durante la Guerra Civil española los voluntarios internacionales, aunque una pequeña minoría del Ejército Popular, desempeñaron un importante papel como tropas de choque en defensa de la República.

Existe una amplia bibliografía relativa a los 32.000 extranjeros que lucharon con las Brigadas Internacionales. Sin embargo, poco se sabe de los otros cientos de voluntarios internacionales que permanecieron en las milicias obreras tras la formación de las Brigadas en octubre de 1936.

En el caso del Partido Obrero de Unificación Marxista, el Homenaje a Cataluña de George Orwell es el principal relato de la experiencia de estos voluntarios. El texto de Orwell ha configurado la opinión crítica sobre la revolución, el papel de los comunistas y las realidades de la vida en la fuente. Sin embargo, dada la naturaleza de su libro y las circunstancias en que fue escrito, su alcance es inevitablemente limitado. Los otros seiscientos extranjeros que lucharon con el POUM han permanecido en gran medida a la sombra de Orwell. Además, la investigación sobre la experiencia de estos voluntarios se ve obstaculizada por el carácter limitado y extremadamente disperso del material de archivo o por su total ausencia.

Las motivaciones y los orígenes de los combatientes extranjeros del POUM en el frente de Aragón durante los diez primeros meses de la guerra fueron similares a los que formaron las Brigadas Internacionales, mucho más numerosas. Ambos pagaron un alto precio en la lucha contra el fascismo[1] La principal, y terrible, diferencia entre las dos fuerzas fue que en lugar de ser tratados como héroes los combatientes extranjeros del POUM serían objeto de una campaña de vilipendio como «agentes del fascismo».

El Grupo Internacional

Con la derrota del levantamiento militar en Cataluña, las organizaciones obreras se apresuraron a formar milicias para marchar hacia Zaragoza y Aragón, que estaba en manos fascistas. La primera columna, encabezada por el líder de la CNT Benaventura Durruti, salió de Barcelona el 23 de julio. Otras dos columnas salieron al día siguiente. La tercera de estas columnas estaba formada por miembros del POUM y del recién creado Partido Comunista de Cataluña, el PSUC. Después de recoger más voluntarios en el camino, se organizó una columna específica del POUM en el bastión del partido, Lérida, antes de partir hacia el este de Aragón[2]. Al igual que otras columnas de milicianos, las milicias del POUM establecieron comités en los pueblos que ocuparon, colectivizaron la tierra e impartieron justicia revolucionaria.

Entre los mil combatientes de la primera columna del POUM había una treintena de voluntarios extranjeros, en su mayoría refugiados antifascistas alemanes e italianos, ya residentes en Barcelona. Algunos eran miembros de partidos afiliados a la Oficina Internacional de Unidad Socialista Revolucionaria (IBRSU), que había sido fundada por una docena de partidos comunistas y socialistas de izquierda disidentes, entre ellos los precursores del POUM, en 1933[3] La IBRSU era muy crítica con el estalinismo y contraponía la creación de una Unión Obrera contra el fascismo a la estrategia del Frente Popular, que creían que subordinaba a la clase obrera a la democracia burguesa.

En 1936, los alemanes constituían la mayor comunidad de refugiados políticos en Barcelona. Entre ellos había miembros del Partido Socialista Obrero Alemán (SAPD), afiliado al IBRSU,[4] y del Partido Comunista de la Oposición Alemana (KPD-O)[5] Ambos partidos desempeñarían un papel destacado en el apoyo al POUM, tanto en el frente como en la retaguardia. Con la victoría del Frente Popular en febrero de 1936, más refugiados habían llegado a Barcelona, especialmente italianos; entre ellos varios miembros del Partido Socialista Maximalista Italiano (PSMI), que estaba alineado con el IBRSU, y un grupo de trotskistas que también entrarían en contacto con el POUM. Junto con otros muchos refugiados antifascistas, estos primeros combatientes habían participado en los combates callejeros del 19 de julio en la capital catalana, durante los cuales un grupo dirigido por la trotskista italiana Virginia Gervasini y la militante austriaca del PSMI Rosa Winkler había tomado el Hotel Falcón en las Ramblas, que albergaría a muchos de los extranjeros que llegaron en los próximos meses para apoyar al POUM.

Al llegar a Aragón, la columna del POUM se dividió; una parte se dirigió al pueblo de Sietamo, que fue tomado brevemente por una fuerza combinada de CNT, POUM y milicias locales[6] El resto de la Columna, habiendo tomado Alcubierre y otros pueblos sin apenas oposición, llegó a Leciñena en la carretera de Zaragoza el 5 de agosto; desde donde el 17 de agosto atacaron el pueblo de Perdiguera. Entre los que participaron en lo que resultó ser un desafortunado asalto de las milicias mal equipadas y mal organizadas, se encontraba el joven poeta británico John Cornford, de gran talento, y varios miembros del KPD(O). Cornford, aunque miembro del Partido Comunista Británico, se había unido a las milicias del POUM en Leciñena por casualidad el 14 de agosto, tras haber acompañado al frente al periodista austriaco Franz Borkenau. Al cabo de un mes regresó enfermo a Gran Bretaña, donde organizó uno de los primeros grupos de voluntarios británicos. Moriría luchando con las Brigadas Internacionales en Lopera, Andalucía, el 28 de diciembre de 1936[7].

Durante las primeras semanas de la guerra, cientos de izquierdistas extranjeros cruzaron la frontera para luchar contra el fascismo y participar en la revolución. Las organizaciones obreras trataron tanto de canalizar esta solidaridad como de captar voluntarios. El trotskista italiano Nicola Di Bartolo-meo fue designado inicialmente por el POUM para coordinar a los simpatizantes extranjeros del partido a través del Centro Internacional Unido de Refugiados Antifascistas, que había creado con Virginia Gervasini.

Aunque el apoyo internacional al POUM procedía principalmente de los partidos afiliados al IBRSU y al KPD(O), la primera unidad específicamente internacional se formaría por iniciativa de los trotskistas y de los comunistas de izquierda italianos, seguidos de Amadeo Bordiga[8]. Durante los primeros días de la revolución, el movimiento trotskista internacional y el propio Trotsky habían intentado restablecer las relaciones con el POUM[9]. Los voluntarios trotskistas, principalmente franceses e italianos, habían estado luchando con el POUM desde el comienzo de la guerra. El grupo de exiliados de los Bordigistas se había dividido sobre la naturaleza de la guerra en España.

Una minoría argumentaba que se trataba de una guerra revolucionaria y había decidido luchar contra el fascismo en España; la mayoría rechazaba tal participación por tratarse de una guerra entre dos bloques capitalistas.

Las negociaciones entre los representantes de los bordistas y los trotskistas y el POUM llevaron a la formación del Grupo Internacional Lenin (GIL). Tras una semana de entrenamiento, el LIG partió de Barcelona el 29 de agosto como parte de una columna del POUM de ochocientos hombres. El grupo estaba comandado por Enrico Russo[10] e inicialmente estaba formado por cincuenta voluntarios, principalmente franceses e italianos. Otros combatientes extranjeros que ya estaban en el frente se integraron en el Grupo, al igual que un flujo constante de nuevos voluntarios en las semanas siguientes. En octubre, el Grupo Internacional (o «Columna», como también se le denominaba), que formaba parte de la 2ª Columna del POUM, tenía al menos 150 miembros.

En septiembre, las columnas del POUM contaban con unos tres mil combatientes, concentrados en su mayoría al este de Huesca; el resto se encontraba en Leciñena y Alcubierre. La llegada del Grupo Internacional al frente, el 30 de agosto, coincidió con los primeros combates realmente serios de las milicias del POUM. Inmediatamente se unió a cuatrocientos combatientes, en su mayoría miembros de la Juventud Comunista Ibérica (JCI) del partido, que habían ocupado una cuña de territorio centrada en los pueblos de Tierz y Quicena, aislando así las posiciones fascistas en la cresta del Estrecho Quinto y el Monte Aragón al este de Huesca.

Dirigidas por cuadros de la JCI con experiencia en la lucha callejera, las fuerzas de la milicia resistieron durante las cuatro semanas siguientes los ataques de fuerzas mucho más fuertes de Huesca. La presencia del Grupo Internacional, que incluía un pequeño número de voluntarios con experiencia en la Primera Guerra Mundial y en acciones paramilitares en Alemania e Italia, reforzó la moral de la milicia y su capacidad de resistencia. El joven trotskista francés Robert De Fauconnet se convirtió en el primer mártir internacional del POUM al morir en los combates para cortar la carretera de Barbastro el 6 de septiembre. En las semanas siguientes, las milicias del POUM, ahora reforzadas, sufrieron decenas de bajas más, incluyendo miembros del contingente internacional[11].

Con el abandono de Estrecho Quinto y Monte Aragón por parte de los fascistas el 30 de septiembre, los milicianos pudieron concentrarse en el asedio a Huesca. Sin embargo, hasta el 21 de octubre no se intentó una ofensiva total para tomar la ciudad, que se paralizó al día siguiente[12] El fracaso de la ofensiva se achacó posteriormente tanto a la insuficiencia de las milicias como a la traición de su comandante general, el coronel José Villalba[13].

En las semanas anteriores se había perdido un tiempo valioso, permitiendo a los fascistas establecer una línea de defensa fuerte y bien armada alrededor de Huesca. El frente se mantuvo estable y no hubo más intentos de tomar la ciudad hasta junio del año siguiente.

La mayoría de los voluntarios extranjeros del POUM llegaron entre agosto y noviembre de 1936, ayudados a través de Francia y de la frontera por los partidarios de Marcel Pivert en el Partido Socialista Francés, la Gauche révolutionnaire. Durante los diez meses siguientes, probablemente al menos seiscientos voluntarios extranjeros pasaron por las filas de la milicia del POUM en el frente de Aragón[14].

Aunque los que se organizaron políticamente procedían de organizaciones simpatizantes del POUM, en las primeras semanas de la guerra también había un puñado de comunistas y anarquistas extranjeros en su milicia[15] Otros no estaban motivados por ningún compromiso político concreto, salvo un «antifascismo» general[16] Al principio parece que fue bastante fácil cambiar de unidad. Los voluntarios extranjeros del POUM se pasaron a las unidades de la CNT y el PSUC y viceversa. La intención del gobierno republicano después de octubre de 1936 era concentrar a todos los combatientes extranjeros en las Brigadas Internacionales. Mientras que las unidades comunistas se integraron en las Brigadas de forma más o menos inmediata, los contingentes internacionales de la CNT y el POUM se mostraron reacios a ponerse bajo control estalinista.

En el frente de Aragón sólo una minoría de combatientes extranjeros anarquistas y del POUM se transfirieron a las Brigadas Internacionales.

Hasta la fecha se han podido identificar 367 voluntarios de 27 países diferentes con el POUM en Aragón en algún momento entre agosto de 1936 y junio de 1937. De ellos 107 eran alemanes, 77 italianos, 44 franceses, 39 británicos, 16 belgas, 14 holandeses, 10 polacos, 9 austriacos, 8 americanos y 7 suizos. También hubo voluntarios de Argelia, Argentina, Australia, Brasil, Checoslovaquia, Cuba, Dinamarca, Hungría, Irlanda, Lituania, Marruecos, México, Perú, Portugal, Rumania, Sudáfrica y Yugoslavia[17].

Al igual que las Brigadas Internacionales, la mayoría de los voluntarios extranjeros del POUM procedían de países con gobiernos autoritarios o fascistas. Los alemanes fueron los más numerosos, representando probablemente más de un tercio de todo el contingente internacional del POUM[18] La mayoría había abandonado Alemania tras la llegada de los nazis al poder en 1933; algunos ya residían en España antes de la Guerra Civil, y el resto llegó desde Francia una vez iniciado el conflicto. Algunos habían pasado un tiempo trabajando clandestinamente en Alemania, otros habían sido encarcelados en campos de concentración. Tanto el KPD(O) como el SAPD animaron a sus miembros en el exilio a ir a España; especialmente a los que tenían experiencia militar.

La mayoría de los alemanes que sirvieron como oficiales, comisarios políticos o ametralladores eran miembros de estos dos partidos.

Los italianos formaban el segundo grupo más numeroso. La mayoría había participado activamente en actividades antifascistas, y muchos habían pasado por la cárcel, antes de exiliarse. Eran principalmente refugiados que vivían en Francia o España. Aparte de los trotskistas y los bordigistas de la LIG, que eran en su mayoría antiguos miembros del PCI, el grupo más numeroso de combatientes italianos organizados procedía del PSMI.

Dado que los combatientes franceses constituían un tercio de todas las tropas de las Brigadas Internacionales, es razonable suponer que había bastantes más voluntarios franceses en las filas de la milicia del POUM que los cuarenta y dos identificados. Además, tanto los combatientes norteafricanos como los polacos tenían a menudo la nacionalidad francesa. Otros treinta y seis voluntarios residentes en Francia, probablemente de origen español, también formaban parte de la milicia del partido[19].

Había pocos voluntarios británicos antes de la llegada del contingente del Partido Laborista Independiente en enero de 1937. La mayoría de los voluntarios belgas eran miembros del Parti Socialiste Révolutionnaire trotskista; varios de ellos habían luchado previamente en la defensa de Irún[20] Casi todos los voluntarios holandeses parecen haber sido miembros del Partido Socialista Obrero Revolucionario (RSAP), afiliado al IBRSU, que había sido fundado por socialistas de izquierda y trotskistas en 1935.

Al igual que las Brigadas Internacionales, muchos de los voluntarios del POUM eran de origen judío, sobre todo entre los voluntarios alemanes, polacos y belgas y en los servicios médicos de la milicia. Al igual que las Brigadas, la mayoría del contingente extranjero del POUM tenía más de veinte años y era de origen obrero. Dado que las milicias eran menos estrictas en cuanto a la edad de los voluntarios, había bastantes que tenían menos de veinte años o más de cuarenta. Entre estos últimos se encontraban los pocos voluntarios con experiencia militar y, en el caso de los alemanes e italianos en particular, los veteranos de los movimientos revolucionarios de principios de los años veinte.

Además de Orwell y Cornford, otros escritores y artistas de la milicia del POUM fueron el escritor polaco Wladamir Malacki[21], más conocido como Jean Malaquais, los poetas surrealistas Benjamin Péret[22] y el cubano Juan Brea, los artistas alemanes Karl Heidenreich[23] y Otto Töwe, el bailarín y escritor británico Greville Teixidor y el dramaturgo italiano Mario Traverso.

Probablemente la contribución más importante a las milicias de los voluntarios internacionales del POUM fue como oficiales y en los servicios médicos. La mayoría de los oficiales extranjeros dirigieron unidades internacionales, como fue el caso de Enrico Russo y el francés Jean-Claude Laf-argue, que comandaron la Agrupación Internacional Lenin, o Bob Edwards, de la ILP. Otros desempeñaron un papel importante en la estructura de mando del POUM en su conjunto, como fue el caso, en particular, del italiano Camillo Lanzillota, el alemán Hans Reiter y el ruso Georges Kopp.

Como estudiante, Lanzilotta había participado en la lucha contra las escuadras fascistas en Bari, Pisa y Roma, siendo herido en dos ocasiones. En 1922 se alistó en el ejército italiano, donde participó en actividades clandestinas contra el fascismo hasta su detención en 1934. Tras escapar de la cárcel en agosto de 1936, se dirigió, vía Francia, a España, donde se alistó en la Columna Internacional del POUM. Su experiencia militar le llevó a ser nombrado Jefe de Estado Mayor de la División Lenin del partido.

Reiter procedía de una familia de militares y había sido alumno de la Escuela de Cadetes de Múnich.

Escuela. En España, afirmará que estuvo preso en un campo de concentración y que su padre fue asesinado por los nazis.24 Lo que parece claro es que Reiter pasó algún tiempo en la Legión Extranjera antes de ir a España en 1935. Al mando de una escuadra de ametralladoras, participó en los combates en torno a Quicena en septiembre de 1936 y más tarde dirigió el Batallón de Choque del POUM.

Kopp se presentó como ingeniero e inventor belga, socialista y oficial del ejército de reserva. Supuestamente llegó al frente huyendo de su país, tras haber sido condenado a quince años de prisión en su ausencia por «fabricar explosivos para una potencia extranjera».25 Sin embargo, investigaciones recientes han demostrado que la versión de Kopp sobre quién era es parcialmente falsa. Kopp trabajó efectivamente como ingeniero, pero nunca había terminado sus estudios, por lo que no estaba formalmente cualificado como tal. No hay pruebas de que estuviera en el ejército ni de que participara en el contrabando de ayuda militar a España. En realidad, Kopp tenía un pasado algo turbio. Había nacido en San Petersburgo, de padres belgas, en 1902, y aunque vivió en Bélgica desde los siete años, nunca obtuvo la nacionalidad belga.

Tenía aspiraciones como inventor y participó en varios proyectos sin éxito.

Las razones más probables de su salida de Bélgica fueron los problemas familiares y las deudas. Kopp llegó a Barcelona en el otoño de 1936 y convenció al POUM de sus credenciales antifascistas y militares y posteriormente comandó diferentes unidades en el frente de Huesca. A pesar de su engaño, demostró, según diversos testimonios, ser un oficial valiente y eficiente.

Kopp comandaría posteriormente el Tercer Regimiento de la División Lenin[26].

Otros voluntarios extranjeros que sirvieron como oficiales en la milicia del POUM fueron los alemanes Kurz Álvarez[27], Peter Blachstein, Josep Halm, Erich Hartmut[28], Peter Huber y Hans Sitting, los italianos Enrico Crespi y Paolo Girelli[29], el argentino Juan Moner[30], el polaco Benjamin Lewinski[31] y el yugoslavo Franjo Čagalj.

Entre los comisarios políticos del POUM destacaban el rumano Sebastian Wisner y el alemán Walter Schwarz[32]. Wisner, probablemente miembro del Partido Socialista Unificado rumano, formaba parte del Estado Mayor de la milicia. Schwarz sirvió de enlace entre el contingente alemán y la dirección del POUM. Otros comisarios extranjeros fueron los alemanes Otto Breismann y Horst Lichenstein y los italianos Giuseppe Borgo y Amos Salvadori.

Los voluntarios extranjeros desempeñaron un papel fundamental en los servicios médicos de la milicia.

Entre los médicos del frente estaban los estadounidenses Max Gerchik y Louis Levin, el austriaco Sam Salzmann, la alemana Charlotte Margolin, el italiano Berardino Fienga, el peruano José Briones, la polaca Olga Monskheli Preiss y los rumanos Felix Ippen y Salomán Wisner.

Gerchik, estudiante de medicina, había llegado a Barcelona para participar en las Olimpiadas Populares. Levin actuó como médico en el contingente de la ILP. Margolin, miembro del KPD(O), que había trabajado anteriormente en la prestigiosa Universidad de Medicina de Berlín, había llegado a Barcelona en 1934[33] Tras un periodo en el frente con la Columna Miguel Pedrola, trabajó en el Sanatorio Maurin de Barcelona. Fienga, simpatizante de los Bordigistas, había ido al frente de Madrid con el Batallón Octubre de la JSU en julio de 1936 donde fue herido. Más tarde fue a Barcelona donde organizó los servicios médicos de la División Lenin[34]. Briones había trabajado como médico en el pueblo de Oliana, Lleida, antes de ir al frente con la primera Columna del POUM[35]. Monskheli Preiss había llegado a Barcelona en agosto, antes de ir al frente con Margolin el 15 de septiembre, donde también sirvió en la Columna Pedrola. Salomán Wisner («Mina»), hermano del comisario Sebastian Wisner, había participado en la revolución húngara de 1919 y en el levantamiento comunista búlgaro de 1923. Especialista en traumatismos craneales y lesiones laborales, llegó a Barcelona en mayo de 1936 y ayudó a organizar los primeros servicios médicos del POUM en el frente.

A pesar de que el POUM defendía la incorporación de las mujeres al proceso revolucionario y la necesidad de su organización política, parece que pocas milicianas del partido lucharon. La mayoría de las mujeres que estuvieron en el frente con el POUM, al igual que con otras milicias, estaban en los servicios médicos o cocinaban.

Hubo varias mujeres extranjeras en el frente con el POUM en algún momento, entre ellas, además de Margolin y Monskheli, la austriaca Rosa Winkler; las británicas Greville Teixidor (Foster) y Sybil Windgate, la francesa Susagna Lemaitre, las alemanas Angelina Franziska, Else Homberger (Henschke) y Eva Laufer y la italiana Giuseppa Buisan. Otras militantes extranjeras desempeñaron un papel activo en la retaguardia, como Virginia Gervasini o la británica Mary Low. La mayoría parece haber estado relacionada con los servicios médicos de la milicia. Franziska, Laufer, Windgate, Zimbal y, probablemente, Lemaitre eran enfermeras. Windgate, miembro de la Liga Socialista, sólo estuvo brevemente en el frente con el Contingente del ILP antes de que el representante del partido en Barcelona, John McNair, la obligara a volver a la retaguardia. Laufer, estudiante de medicina, trabajó más tarde como ortopeda en el hospital de Lleida. Lemaitre fue adscrita a la Artillería del POUM.

Se desconoce si las demás mujeres lucharon. Ciertamente, en el frente de Aragón no hubo ninguna equivalente a la argentina Mika Etchebéhère que dirigió una compañía del POUM en el frente de Madrid. Rosa Winkler fue al frente con la LIG, pero en octubre ya había regresado a Barcelona. El escritor y bailarín Teixidor estuvo brevemente con el POUM al principio de la guerra antes de unirse a la Columna Durruti. La trotskista suiza Clara Thalmann pasó un breve tiempo con el Batallón de Choque del POUM en abril de 1937 después de haber estado con la Columna Durruti[36].

Una excepción fue la alemana Magarete Zimbal, de diecinueve años, que antes de la guerra había huido de su padre nazi, viajando a España en 1933, donde conoció a Erwin Bresler.

Vivieron de la venta ambulante y en 1936 llegaron a Sitges, donde se afiliaron a la JCI y vivieron con los miembros del KPD(O) Else Homberger y Gerhard Henschke. En agosto de 1936, los cuatro formaron parte del contingente del POUM en la campaña para retomar Mallorca, donde Bresler fue asesinado. Al regresar a Barcelona, Zimbal se dirigió al frente de Aragón. Murió el 22 de octubre durante la ofensiva sobre Huesca.

En el momento de su muerte, Zimbal fue descrita como enfermera, pero también había combatido.

Se convirtió en una mártir de la JCI y su funeral en Barcelona fue acompañado por una gran manifestación de todas las organizaciones obreras. En su honor se decidió formar un batallón exclusivamente femenino, el Batallón Magarita Zimbal, pero nunca se materializó, a pesar de que el POUM era la única organización obrera que ofrecía formación militar femenina en la retaguardia[37].

La División Lenin

A medida que avanzaba la guerra se hizo evidente en el bando republicano la necesidad urgente de organizar el esfuerzo de guerra sobre una base más centralizada y eficiente. Paralelamente a la reconstrucción del Estado republicano se organizó en octubre de 1936 el nuevo Ejército Popular. El POUM también insistió, en contra de lo que se suele afirmar, en la creación de un mando unificado y de un ejército disciplinado. Más que el Ejército Popular «burgués», dicho ejército seguiría el modelo del Ejército Rojo soviético durante los años de la guerra civil rusa. Estaría bajo el control de las organizaciones obreras, aunque no organizadas en función de los partidos o sindicatos como las milicias. Todos los trabajadores de entre 18 y 30 años serían reclutados para luchar. Como medida de «higiene revolucionaria», los elementos burgueses y de clase media sólo llevarían a cabo tareas logísticas como la excavación de trincheras[38].

En Cataluña, las milicias habían estado bajo el control del Comité de Milicias Antifascistas y, después de principios de octubre, por el recién unificado Gobierno catalán. Con la introducción de la militarización, las milicias catalanas se transformaron en el Ejército Popular Catalán en diciembre de 1936, controlado por el Consejo de Defensa de la Generalitat (Ministerio), en lugar de por el Gobierno republicano de Valencia. El Ejército Catalán se dividió en Divisiones, cada una con tres Regimientos formados por cuatro Batallones de 440 hombres, con sus propias unidades de artillería, ametralladoras, comunicaciones y zapadores[39].

Incluso antes de la creación del Ejército Catalán, la milicia del POUM había sufrido su propia versión de «militarización» bajo el mando de Josep Rovira[40], que había sido nombrado comandante de las fuerzas del partido el 19 de septiembre. Rovira introdujo un entrenamiento más eficiente, mejores defensas y una reorganización militar. Anteriormente, al igual que otras milicias, las fuerzas del POUM se habían organizado en Centurias o Banderas de unos cien combatientes. Los batallones se formaban sobre la base de cuatro Centurias, que a su vez se convertían en compañías.

En contraste con la visión popularizada por Orwell, las memorias e informes de la época presentan a la milicia del POUM como bien organizada y disciplinada, a pesar de las circunstancias adversas. La disciplina se mantenía principalmente sobre la base del compromiso político de los combatientes; las deserciones eran muy raras, a pesar de la falta de permisos[41]. Un informe escrito por el veterano militante del KPD(O), Waldemar Bolze, en abril de 1937, describe el impresionante estado de las redes de defensa en el sector de Tierz-Quicena, donde las trincheras en algunos lugares estaban a apenas cincuenta metros del enemigo[42].

A finales de diciembre de 1936, las milicias del POUM estaban organizadas en cuatro columnas: la Columna Miguel Pedrola, antigua Segunda, la Columna Joaquín Maurin y las columnas más pequeñas Miguel Lobo y Juventud Comunista Ibérica. Estas Columnas ocupaban un tramo de quince kilómetros del frente de Huesca que iba desde La Granja (al este de Montflorite) en el sur hasta cerca de Fornillos de Apiés en el norte. Mientras que las Columnas Pedrola y Maurín, de mayor tamaño, mantenían el tramo al norte de la aldea de Bellestar, las Columnas Lobo y JCI estaban estacionadas alrededor de Montflorite y en la Sierra de Alcubierre al sur.

Desde finales de noviembre, las columnas del POUM ya se referían a sí mismas como la «División Lenin», pero la reorganización formal de las Columnas como parte del Ejército Popular Catalán en Regimientos, con Batallones y Compañías no se completó hasta finales de marzo de 1937[43].

Para entonces la División Lenin estaba supuestamente compuesta por 6.590 efectivos: 5.750 de infantería, 196 artilleros (dos baterías), 264 de caballería y 380 zapadores (dos compañías)[44].

Todas las fuerzas milicianas del frente de Aragón se quejaban de la falta de armas. Se pedía constantemente que se enviaran armas al frente y que se lanzara una ofensiva inmediata. En particular, la falta de artillería y de cobertura aérea hacía casi imposible la toma (después de principios de octubre de 1936) de posiciones enemigas bien defendidas[45] Cada vez se acusaba más al Gobierno republicano de sabotear el frente de Aragón porque estaba dominado por la izquierda revolucionaria.

La falta de armamento y material suficiente de la División Lenin hizo que nunca fuera reconocida formalmente por el Gobierno catalán. Para 5.750 infantes la División Lenin disponía de 3.752 fusiles (65%) frente a la División Ascaso, con la que compartía el frente de Huesca, que tenía 5.495 fusiles para 7.090 infantes (77%). Un problema mayor era la falta de ametralladoras, tan esenciales para la guerra de trincheras. La División Lenin sólo tenía veinticinco, frente a las noventa y cuatro de la División Ascaso[46].

Las cifras por sí solas no tienen en cuenta la calidad de las armas disponibles.

Los testimonios coinciden en la mala calidad tanto de los fusiles como de las ametralladoras y en la falta de munición, que aunque estuviera disponible era a menudo de diferentes calibres. El fuego de artillería, debido a la falta de proyectiles y al mal estado de los cañones, era esporádico y generalmente impreciso. El armamento disponible sólo empezó a mejorar ligeramente cuando el Ejército de Cataluña se integró en el Ejército Popular en mayo de 1937.

El Ejército de Cataluña pasó a ser el Ejército del Este bajo el control del Estado Mayor del Ejército Popular. Cada División fue numerada y reorganizada en tres Brigadas Mixtas, cada una de ellas formada por cuatro Batallones con sus secciones correspondientes, totalizando, en teoría, 4.269 hombres. Sin embargo, en el frente de Aragón ninguna Brigada Mixta llegó a estar completa y cuando el frente cayó en marzo de 1938 pocas tenían más de dos mil quinientos efectivos, más o menos el mismo tamaño que los Regimientos a los que sustituyeron un año antes[47] La División Lenin fue ahora reconocida formalmente, convirtiéndose en la 29ª División; aunque sólo tenía suficientes hombres y material para dos Brigadas, la 128ª y la 129ª[48].

Orwell y el contingente de la ILP

El 12 de enero, veinticinco voluntarios organizados por el ILP llegaron a Barcelona.

El ILP había roto con el Partido Laborista en 1932 por su apoyo al Gobierno Nacional y había evolucionado hacia el socialismo revolucionario, convirtiéndose en uno de los principales organizadores del IBRSU. Había comenzado a organizar el reclutamiento para España en noviembre, después de que uno de sus dirigentes, Bob Edwards, viajara a Barcelona con una ambulancia donada al POUM. Este primer grupo se presentó como la vanguardia de una fuerza mayor que iba a seguir, pero la prohibición del gobierno británico de que sus ciudadanos lucharan en ejércitos extranjeros impidió que se siguiera reclutando[49] Se les unieron en el frente otros voluntarios de habla inglesa, entre ellos Orwell, que había llegado al frente con una centuria de la nueva columna de la JCI tres semanas antes.

A lo largo de los cinco meses siguientes, al menos cuarenta y cinco voluntarios, incluido el personal médico, pasaron por las filas de la ILP Contigent. De ellos, treinta y cinco eran ciudadanos británicos, cuatro estadounidenses, tres irlandeses, un australiano, un polaco y un sudafricano.

Entre los ciudadanos británicos había al menos seis escoceses, cinco galeses y dos de Irlanda del Norte.

Se sabe que 24 de ellos eran miembros del ILP. Tres eran miembros de la Liga Socialista, una facción dentro del Partido Laborista. El polaco Juliusz Kampfer era miembro del Partido Socialista Independiente polaco; el estadounidense Harry Milton de la Liga Obrera Revolucionaria y el joven de dieciocho años Stafford Cottman de la Liga de Jóvenes Comunistas[50] Según el MI5 quince del Contingente del ILP tenían experiencia militar antes de ir a España[51].

Orwell había ido al frente con jóvenes milicianos sin experiencia; parte de la recién formada Columna de la JCI que fue enviada a las montañas de Alcubierre. Allí se unieron a los restos de las fuerzas, probablemente desmoralizadas, que habían sido arrolladas en Leciñena en octubre anterior. Orwell se sintió «profundamente disgustado» cuando comprobó que el enemigo estaba a unos setecientos metros. Parece ignorar que otros milicianos, principalmente de la División Carlos Marx del PSUC, estaban muy cerca de la posición aislada de los fascistas en «San Simón», frente a él, que había sido tomada tras la caída de Leciñena. A finales de febrero, las fuerzas del POUM en la zona de Alcubierre fueron enviadas a unos sesenta kilómetros al norte para unirse a sus compañeros que se enfrentaban a Huesca. El Contingente del ILP fue trasladado a las líneas frente a La Granja, como parte del recién organizado Tercer Regimiento bajo el mando de Georges Kopp. Aunque Orwell comentó la mejora en el estado de las defensas, así como en el armamento y la formación, seguía en lo que era la parte más tranquila de un frente ya tranquilo.

El batallón de choque

Con la reorganización de las milicias del POUM, también se reorganizaron los voluntarios extranjeros. En octubre, el Grupo Internacional Lenin había sufrido una crisis cuando veintinueve de sus miembros, principalmente bordiguistas y trotskistas, dimitieron en protesta por la aceptación de la militarización por parte del POUM. [Los bordiguistas afirmaban ahora que la guerra había dejado de ser revolucionaria y la mayoría se marchó a Francia o se fue a trabajar en la retaguardia; aunque Enrico Russo, el comandante del Grupo, permaneció en el Estado Mayor de la Milicia del POUM al menos hasta enero de 1937[53] Habiéndose vuelto cada vez más críticos con el POUM, especialmente desde su decisión de unirse al Gobierno catalán a finales de septiembre de 1936, algunos de los trotskistas se fueron a luchar en unidades de la CNT. Otros, como los miembros del disidente Parti Communiste Internationaliste o los holandeses, permanecieron dentro de la milicia del POUM. Una consecuencia de la creciente tensión entre el POUM y los trotskistas fue la sustitución de Di Bartolmeo por el comunista disidente austriaco Kurt Landau como coordinador del departamento internacional del POUM. Max Diamant, que llegó a Barcelona en octubre para representar al SAPD, consolidó el control de los afiliados del IBRSU sobre el aparato internacional del POUM.

Mientras tanto, un nuevo intento, el 21 de noviembre, de tomar la Loma del Manicomio, en el sector de Quicena, llevó a Rovira a ver la necesidad de organizar un Batallón de Choque basado en voluntarios con cierta experiencia militar. Dos tercios del nuevo «Batallón de Choque Rovira» eran voluntarios extranjeros; muchos de los restantes eran antiguos miembros de la Bandera Pedrola que habían demostrado su valía durante los combates de la carretera de Barbastro en septiembre.

La mayor parte del ya numeroso contingente alemán fue reclutado en el Batallón de Choque, así como la mayoría de los voluntarios holandeses y centroeuropeos y un puñado de otras nacionalidades. El Estado Mayor de la milicia estaba convencido de la destreza militar de los combatientes alemanes y éstos fueron inicialmente destacados entre sus oficiales y comisarios. El miembro del KPD(O) Peter Huber fue su primer comandante. Reiter fue inicialmente el segundo al mando.

En teoría, las tropas del nuevo Batallón debían ser miembros del POUM o de uno de los partidos afiliados al IBRSU y estar dispuestas a «luchar hasta la muerte»[54] El Batallón disponía de las mejores armas y de sus propios uniformes de color verde oscuro[55] La disciplina y el adiestramiento eran estrictos y quien se negara a obedecer una orden «probablemente sería fusilado». En su base de Fañanás, a unos doce kilómetros detrás de las líneas, el Batallón estableció su propio gimnasio, biblioteca y escuela, que, entre otras cosas, enseñaba idiomas[56] Con la formación del Batallón de Choque, dejó de existir una Columna (o Grupo) Internacional separada. Los voluntarios extranjeros que no estaban en el nuevo Batallón se integraron en diferentes Centurias o secciones específicas, como fue el caso de la Gauche révolutionnaire, el PSMI y la ILP.

Los escasos combates en los que participaron las tropas del POUM antes de la ofensiva de junio de 1937 fueron protagonizados por el Batallón de Choque[57], que entró en acción por primera vez el 6 de enero, cuando las fuerzas republicanas recuperaron los pueblos de Lierta y Arascués, a unos quince kilómetros al norte de Huesca, que habían sido capturados por los fascistas el 20 de diciembre. Además del Batallón de Choque, participaron tropas de otras dos Centurias del POUM, así como unidades de la División Ascaso de la CNT y de las Milicias de Barbastro. Dirigido por la sección de ametralladoras de Huber y Reiter, el Batallón de Choque tomó la cresta de Arascués y luego asaltó la vil edad de Liertes en un ataque relámpago, después de que los milicianos de la CNT hubieran asegurado los flancos. Los milicianos implicados fueron felicitados por su «brillante» éxito. Al menos tres jóvenes voluntarios internacionales perdieron la vida[58].

El 19 de febrero las tropas fascistas tomaron el pueblo de Vivel del Río Martín, a ochenta kilómetros al norte de Teruel. A falta de reservas en la zona, una expedición que incluía tropas del Batallón de Choque, ahora bajo el mando de Reiter, y las columnas Maurin y JCI, las milicias del PSUC y la CNT fue enviada cuatro días después para retomar el pueblo. A pesar de que las tropas del POUM y de la CNT ocuparon posiciones alrededor de Vivel, el ataque fue rechazado. En las semanas siguientes, la prensa del POUM culpó a la unidad del PSUC de haber permanecido pasiva, saboteando así el ataque[59].

La acción más sangrienta en la que participó el Batallón de Choque antes de la ofensiva de junio, fue un nuevo intento de tomar la estratégica e importante cresta conocida como la Loma del Manicomio el 17 de marzo de 1937. Designada por las fuerzas fascistas como la «posición número 2», los dos montes que formaban la loma dominaban la zona circundante. El asalto formaba parte de una operación diseñada por el Estado Mayor para restar presión a Guadalajara (la batalla había comenzado el 8 de marzo) y reforzar las posiciones para aislar definitivamente a Huesca[60].

Dada la fortaleza de las defensas de los fascistas, el asalto inicial se realizó al amparo de la oscuridad. A las cuatro de la mañana, sesenta soldados del Batallón de Choque, dirigidos por Reiter, tomaron la loma más septentrional en un ataque por sorpresa tras lanzar bombas de mano contra las trincheras enemigas. En los combates cuerpo a cuerpo que se produjeron murieron unos cuarenta guardias civiles. Informes contradictorios en la prensa del POUM sugieren que algunas de las tropas enemigas podrían haber sido eliminadas después de haberse rendido. Las fuentes fascistas, sin embargo, sólo hablan de trece pérdidas y no mencionan ninguna masacre.

Las tropas del Batallón de Choque, reforzadas, mantuvieron la posición capturada durante seis horas antes de verse obligadas a retroceder, ya que ninguno de los otros objetivos de la operación republicana prevista había sido tomado, lo que permitió a los fascistas traer más tropas y utilizar la artillería y los bombardeos aéreos para retomar la colina. La infantería enemiga había utilizado 12.000 cartuchos de fusil, noventa granadas y cien bombas de mortero antes de tomar la posición a punta de bayoneta. El apoyo aéreo prometido por la República no se materializó[61].

La retirada, a través de terreno abierto hasta las trincheras del POUM, resultó costosa, ya que al menos veinticinco miembros del batallón murieron y otros sesenta y cinco resultaron heridos. Según fuentes fascistas, hubo unos cincuenta muertos republicanos, entre ellos cinco que fueron hechos prisioneros y ejecutados. Entre los muertos había voluntarios británicos, holandeses, franceses, alemanes, italianos, marroquíes y catalanes. El heroísmo del Batallón fue alabado en la prensa del POUM y en los funerales de los muertos se dirigieron, entre otros, un miembro alemán del Estado Mayor de la División Lenin, Josef Halm, y el comisario político rumano Sebastian Wisner[62].

El 13 de abril por la mañana temprano, para aliviar la presión sobre la División Ascaso que atacaba por el norte, setenta efectivos de la Brigada de Choque, en su mayoría alemanes, participaron en una incursión nocturna en las líneas frente a la Ermita Salas, al este de Huesca, acción que es descrita gráficamente por Orwell en Homenaje a Cataluña.

También participaron 15 miembros del Contingente de la ILP, entre ellos Orwell, junto con otras tropas del 2º Batallón del 3º Regimiento, al mando de Gregorio Jorge («Jorge Roca»). Sería la única acción en la que participó el Contingente de la ILP y sólo pudo considerarse un éxito menor. El Batallón de Choque no pudo tomar la posición asignada debido al intenso fuego enemigo. Se capturaron algunas armas y hubo informes de bajas fascistas. Lo más trágico fue que una docena de miembros de la JCI quedaron atrapados en tierra de nadie durante todo el día siguiente. Sólo uno consiguió volver con vida[63].

La 29ª División

Mientras tanto, la campaña contra el POUM, acusado por los estalinistas de estar aliado con el enemigo, continuó sin cesar y fue el telón de fondo de los combates que estallaron en Barcelona a principios de mayo[64] Unos setenta milicianos del POUM, la mayoría del Batallón de Choque, ya habían sido enviados a Barcelona para proteger los locales del partido[65].

Se les unió Orwell y un pequeño grupo de voluntarios del ILP, que estaban de permiso. Al menos nueve de este grupo, incluido Orwell, esperaban pasarse a las Brigadas Internacionales como ya habían hecho otros voluntarios extranjeros del POUM.66 Lo que presenciaron en Barcelona convencería a la mayoría de ellos de que no podían abandonar el POUM cuando estaba siendo calumniado y atacado físicamente.

Cuando la noticia de los combates llegó al frente provocó una ola de indignación pero, en contra de lo que se ha afirmado, las tropas del POUM no abandonaron las trincheras para ir a Barcelona.67 En su lugar, Rovira, con «una fuerte escolta» de soldados del Batallón de Choque se dirigió a Binéfar para investigar. En el camino, en Sietamo, se les unieron «varios cientos» de soldados de la 28ª División de la CNT. Las tropas de la CNT fueron convencidas de esperar en Binéfar, donde se enfrentaron a las fuerzas locales. Mientras tanto, Rovira se dirigió con los comandantes de la 28ª División, Máximo Franco y Miguel García Vivancos, a Lleida, donde se reunieron con el coronel Alfonso Reyes, miembro del PSUC y comandante de la fuerza aérea del sector, y con Joaquim Vilar, comisario de orden público de la Generalitat en la provincia. Se llegó al acuerdo de que las tropas de la CNT volverían al frente, mientras que al mismo tiempo todas las fuerzas del gobierno se retirarían del exterior de las oficinas de la CNT y el POUM en la provincia[68].

En las semanas siguientes se incrementó la represión contra los sectores más radicales del movimiento obrero, con detenciones generalizadas69 y el cierre de periódicos y oficinas. Se culpó al POUM de haber organizado el «golpe de mayo». Los llamamientos comunistas para que los «trotskistas» fueran suprimidos, si no aniquilados físicamente, se hicieron aún más estridentes. En este contexto, se organizó finalmente una ofensiva sobre Huesca como parte de un plan más amplio para aliviar la presión sobre Bilbao. Se desplegaron 20.000 soldados, 8.000 de los cuales, incluyendo la XII Brigada Internacional, habían sido traídos desde la zona central, apoyados por 18 baterías de artillería y 150 aviones. Las fuerzas rebeldes en Huesca y sus alrededores eran unas 10.000.

La 29ª División del POUM, considerada poco fiable por los mandos comunistas del Ejército del Este, tuvo inicialmente un papel secundario en la ofensiva. A las 04.00 horas del 12 de junio, el 2º Batallón de la 129ª Brigada Mixta de la División lanzó un asalto de distracción sobre el Manicomio y la cresta cercana. Ante la superioridad de la potencia de fuego de los defensores atrincherados, el ataque fue rechazado y, según los fascistas, las fuerzas del POUM sufrieron grandes bajas.70 Ante el fracaso inicial de la ofensiva para cortar la carretera de Jaca y completar el cerco de Huesca, se elaboró un nuevo plan de ataque que incluía un asalto directo el 15 de junio a la 01:00 horas por parte del Batallón de Choque del POUM a la fuertemente fortificada Loma Verde, inmediatamente al norte de la ciudad.

Conscientes de la inminencia del ataque, los fascistas concentraron el fuego de artillería pesada y los ataques aéreos en el sector, obligando al Batallón a retirarse[71].

A primera hora de la mañana, el mismo día en que el POUM fue ilegalizado en la retaguardia y sus dirigentes detenidos, dos compañías del 4º Batallón de la 129ª Brigada Mixta tomaron por sorpresa la estratégica e importante Posición Número Uno de los fascistas, situada en la Loma de las Martires, al este de la Loma Verde. A las dos Compañías se unieron más tropas del 4º Batallón y del Batallón de Choque, voluntarios de la 128ª Brigada Mixta y una compañía de zapadores. Se mantuvieron en reserva cuatro Compañías de Guardias de Asalto (policía paramilitar republicana), que en aquel momento se creía que habían sido enviadas para controlar a las tropas «sospechosas» del POUM. La toma de la Loma de las Martires resultó ser uno de los pocos objetivos tomados durante la ofensiva y lo más cerca que las fuerzas republicanas estuvieron de Huesca. Dado que la posición estaba expuesta al fuego de ametralladoras y artillería fascista desde sus flancos (Loma Verde y Loma del Manicomio) es probable que no se esperara un ataque a la Loma de las Martires. Al fracasar la ofensiva en otros lugares, los fascistas pudieron concentrar su potencia de fuego en la posición tomada. Los bombardeos aéreos y de artillería y los repetidos asaltos de las tropas fascistas, incluidas las unidades marroquíes y de la Legión Extranjera, fueron desgastando a los defensores. Las repetidas peticiones de apoyo aéreo o de artillería de Rovira dieron pocos resultados. Después de resistir durante tres días, las tropas de la 29ª División recibieron la orden de retirarse. Las fuerzas fascistas habían gastado 100.000 cartuchos y sufrieron grandes bajas al retomar la posición[72] Al retirarse, la milicia del POUM se vio expuesta a un fuego demoledor. Se desconoce cuántos voluntarios internacionales se encontraban entre los trescientos efectivos que perdieron la vida. Uno de los muertos fue el jefe del Estado Mayor de la 29ª División, Camil o Lanzilotta, que probablemente había sido enviado para ayudar a evacuar a los milicianos asediados tras la muerte del comandante de la 129ª Brigada Mixta, Amadeu Cahue[73].

El general Sebastián Pozas, comandante del Ejército del Este, felicitó a Rovira por «el valor y el brillante comportamiento» de las fuerzas bajo su mando. Estas felicitaciones duraron poco y la 29ª División fue retirada del frente a la espera de su disolución. Las tropas del Batallón de Choque estuvieron a punto de chocar con las fuerzas del PSUC cuando fueron enviadas a tomar el Depósito de Transportes de la 29ª División en Velil as. La toma de algunos oficiales del POUM como rehenes obligó al Batallón de Choque a rendirse. La 29ª División se disolvió formalmente el 17 de julio. Rovira y otros oficiales ya habían sido detenidos. Muchos de los antiguos miembros de la División del POUM siguieron luchando hasta el final de la guerra en otras unidades[74].

Represión y contrarrevolución

Con la supresión del POUM y la disolución de la 29ª División, el destino de sus voluntarios extranjeros fue variado. Los que no fueron detenidos abandonaron España o se integraron en otras unidades, incluidas las Brigadas Internacionales[75].

Se ha podido identificar a setenta voluntarios extranjeros, cuarenta de ellos alemanes, que fueron detenidos tras los sucesos de mayo y en las semanas posteriores a la ilegalización del POUM y la disolución de la 29ª División. La mayoría de los colaboradores extranjeros del partido en la retaguardia también fueron detenidos. La organización de defensa del KPD (KPD Abwehr) desempeñó un papel decisivo en esta represión, elaborando informes sobre el contingente alemán del POUM y participando en los interrogatorios junto con la policía española y los agentes del NKVD.

Los «trotskistas», en el contexto del terror estalinista en la URSS, eran considerados automáticamente como agentes fascistas y espías. En esta categoría se incluían todos los comunistas y socialistas de izquierda que criticaban a los partidos comunistas oficiales. Los miembros del KPD(O) en particular fueron señalados como «agentes de la Gestapo» «espías» y «terroristas».

Sin embargo, el objetivo de los comunistas de lanzar una purga al estilo moscovita en la zona republicana se vio socavado por su falta de control total sobre el Estado. La política exterior soviética seguía teniendo como objetivo forjar una alianza con las democracias occidentales. Control total del 74. COLL, op.cit, p198; Guarner declaró posteriormente la «espléndida conducta» de la 29 División en su defensa de la Loma de la Martires, Proceso op.cit. p410; sobre la disolución de la 29 División véase: «Informe de las divisiones 25, 26, 28 y 29 del Ejército del Este, presentan al Subsecretario de Tierra, del Ministro de Defensa Nacional, para su resolución en justicia» Azlor (Huesca) sin firmar 3.7.37, Fundación Anselmo Lorenzo. El periódico clandestino de la JCI, Juventud Obrera, publicaba regularmente obituarios a sus compañeros caídos en diferentes frentes; véase también el manifiesto «Les combatants du POUM a la class ouvière mondiale» Les Combattants du POUM (Front du Le-vant, Front de l’Est, Front d’Estremadura, Front du Centre, julliet 1938) (Biblioteca de la Republica, Barcelona).

La República no era de interés para Stalin. Aunque cientos de miembros del POUM fueron encarcelados, y varias docenas, entre ellos Andreu Nin y Kurt Landau, asesinados, los mecanismos reales de represión resultaron contradictorios, si no ineficaces.

Aunque no hay más rastro de algunos de los voluntarios extranjeros que fueron detenidos, sólo se sabe que uno, Bob Smillie, murió en circunstancias sospechosas. Comisario político del contingente del ILP, Smillie fue detenido al cruzar la frontera el 11 de mayo. Encarcelado en Valencia, murió el 11 de junio, supuestamente debido a una apendicitis, para la que no había recibido tratamiento[76] De los milicianos extranjeros del POUM que fueron detenidos, la mayoría fueron acusados de traición, a menudo de ser agentes de la Gestapo o del OVRA. Pero pocos fueron realmente condenados. Una excepción fue Gaston Ladmirall, del Partido Socialista Francés, que fue condenado a muerte, pero que finalmente fue expulsado de España tras la intervención del consulado francés. Walter Schwarz, a pesar de estar acusado de alta traición, sólo fue condenado a seis años de prisión. Posteriormente se fugó.

La campaña internacional de solidaridad organizada por el IBRSU también presionó a las autoridades republicanas. Tres delegaciones internacionales de destacados líderes sindicales y abogados europeos, encabezadas por diputados del ILP, visitaron Barcelona en los meses posteriores a la ilegalización del POUM. Los presos extranjeros, entre los que se encontraban antiguos anarquistas y milicianos del POUM, iniciaron una huelga de hambre en noviembre de 1937 para llamar la atención sobre su situación[77].

Algunos de los detenidos fueron liberados a las pocas semanas y expulsados del país. Otros, tras ser liberados, fueron incluso reintegrados al ejército. Entre los liberados estaba Reiter que, a pesar de ser calificado por el KPD Abwehr como «agente de la Gestapo y terrorista», terminó la guerra con el rango de Mayor y como comandante de la Brigada Mixta 97.[78] El resto permaneció encarcelado, y fue expulsado durante 1938 o, como los dirigentes del POUM retenidos en la Cárcel Modelo de Barcelona, consiguieron escapar justo antes de que los fascistas entraran en la ciudad el 26 de enero de 1939. Unos cuantos se escondieron y cruzaron la frontera en secreto en los meses siguientes.

Un caso aparte fue el de Georges Kopp, que fue detenido el 20 de junio acusado de ser un agente enemigo. Según Orwell, Kopp había viajado a la retaguardia para ser transferido a otra unidad. Lo que Orwell ignoraba es que Kopp parece haber sido nombrado miembro del Estado Mayor de la XII Brigada Internacional, con el grado de capitán. Es muy posible que ya se haya incorporado a su nueva unidad, ya que le dijo a Orwell que había estado combatiendo en los alrededores de Chimillas, donde la XII había entrado en acción los días anteriores a la llegada de Kopp a Barcelona. También es extraño, dadas las acusaciones que se dirigían al POUM, que Kopp, que había sido uno de sus principales oficiales de la milicia, fuera aceptado en el Estado Mayor de la Brigada[79] Su detención sud-den pudo deberse a la denuncia de un voluntario británico, Frank Frankford, de que Kopp había mantenido contactos con el enemigo en el frente. [80] Otro antiguo miliciano que declaró contra el POUM fue el suizo Emile Bannhart, que fue detenido por espionaje en octubre de 1937 y posteriormente denunció al POUM de formar parte de la Quinta Columna. Fue liberado en enero de 1939[81].

Más tarde, Kopp afirmó haber sido interrogado veintisiete veces en ciento treinta y cinco horas por agentes rusos. Cuando se negó a firmar una declaración diciendo que el POUM era espía, según Kopp, lo metieron en un pozo de carbón lleno de ratas durante doce días sin comida y le dijeron que lo fusilarían. Fue liberado en diciembre de 1938 sin cargos y sin orden del juez. No está claro si esto se debió a la intervención de las autoridades belgas, a la solidaridad internacional o a otros factores aún desconocidos[82].

El caso de Kopp puso de manifiesto las malas condiciones en las que se encontraban los prisioneros antifascistas en las cárceles improvisadas y en las chekas. Los miembros del grupo trotskista «bolchevique-leninista», falsamente acusados de asesinar al agente polaco del NKVD Leon Narwicz en febrero de 1938, fueron objeto de un trato especialmente malo. Dos antiguos milicianos del POUM, los trotskistas italianos Domenico Sedran y Luigi Zannon, estuvieron entre los torturados[83].

No se demostró ni un solo caso de espionaje. Los únicos posibles espías de los que se tiene constancia en las filas del POUM probablemente trabajaban para los comunistas, como fue el caso de David Wickes, que estaba en los servicios médicos del ILP, o los alemanes Martin Schneider y Werner Schwarze[84]. Una excepción fue el misterioso Vinzenz Eberle, que podría haber estado en la Caballería del POUM, y que más tarde fue acusado de ser un agente de la Gestapo por la Abwehr del KPD; pero a pesar de haber sido detenido tres veces entre 1937 y 1938 siempre fue puesto en libertad[85].

La lucha continúa

Con la derrota de la República y la llegada de la Segunda Guerra Mundial, muchos de los antiguos voluntarios internacionales se enfrentaron a un nuevo periodo de gran incertidumbre. Algunos voluntarios judíos se quedaron en España, temiendo que el exilio sólo les llevara a una muerte segura.

Este fue el caso, por ejemplo, de la médica Charlotte Margolin y de Reinhold Hoffmann, que también había servido como oficial en las Brigadas Internacionales[86].

Muchos de los que procedían de países con regímenes autoritarios fueron encarcelados, junto con decenas de miles de combatientes republicanos, en condiciones espantosas en los campos de concentración establecidos apresuradamente por un gobierno francés hostil. La mayoría fueron enviados a los campos de Argelès-sur-Mer o Gurs, donde fueron recluidos 6.808 combatientes de las Brigadas Internacionales. Incluso en su sufrimiento común, la campaña estalinista contra los «fascistas trotskistas» no cesó. En Gurs, los antiguos combatientes del POUM se unieron a los prisioneros anarquistas para oponerse al dominio comunista del campo.

Con la ocupación alemana de Francia, la situación de los antiguos voluntarios empeoró. A menudo, los que habían evitado los campos y vivían de forma precaria en Francia, eran ahora acorralados. La mayoría de los italianos fueron expatriados a prisiones en Italia, especialmente en las islas de Ventotene y Tremeti. Otros, sobre todo los de origen judío, fueron enviados a campos de concentración nazis, donde invariablemente perecieron; como fue el caso de los alemanes Herbert Büchner, el miembro del SAPD Franz Gerstner y el trotskista Rudolf Steffens, el austriaco Oswald Wilhelm, el trotskista belga Pierre Schavitz, el militante holandés del RSAP Theo Van Driesten y el trotskista italiano Guido Lionello, que murió días después de ser liberado de Dachau. Otros, como el austriaco Franz Ortner, los trotskistas belgas Florent Galloy, Camille Loots y Pierre Wouwermans, el trotskista francés Georges Fournié y los bordigistas italianos Gildo Belfiore y Emilio Lionello sobrevivieron a los campos.

Otros antiguos combatientes del POUM, tras escapar de la detención, se unieron a la resistencia, primero en Francia, Holanda y Bélgica y más tarde con los partisanos en Italia. En Francia, la austriaca Rosa Winkler y los italianos Duilio Balduni y Giuseppe Bogoni, todos ellos miembros del PSMI, formaron parte del grupo de resistencia Fédérer et libérer. Gaston Ladmirall entró en la resistencia en 1941 y participó en la sublevación de París en agosto de 1944, al igual que el bordiguista Mario Bramati, que murió en los combates. Los trotskistas Pavel Thalmann y Guido Lionello también participaron en la resistencia francesa. En Holanda, varios miembros del RSAP que habían luchado con el POUM se unieron a la resistencia. El miembro del PSMI Estrucco Benci trabajó con el trotskista Domenico Sedran en la resistencia belga. Benci fue ejecutado con otros doscientos combatientes de la resistencia en enero de 1943. Muchos antiguos combatientes del POUM liberados de los campos italianos en 1943 se unieron a los partisanos o participaron en la reorganización del movimiento obrero en la zona liberada.

Antiguos milicianos británicos y estadounidenses se unieron a sus respectivos ejércitos, al igual que algunos de los que habían conseguido exiliarse[87] Benjamin Lewinski desertó de la Legión Extranjera en el Líbano y se unió a las Fuerzas Francesas Libres en Palestina. Siguió luchando en el norte de África, Italia y Francia. Hans Reiter, tras pasar por el terrible campo de prisioneros de Morand en el norte de África, también se unió a las fuerzas de la Francia Libre, convirtiéndose en sargento de la famosa 9ª Compañía de la 2ª División Acorazada del General Philippe Leclerc, en la que se distinguió en combate. El 24 de agosto de 1944 estuvo al mando del primer semioruga de la 9ª compañía que llegó al Hotel de Ville. Más tarde fue con Leclerc a Indochina.

Georges Kopp, tras regresar a Francia desde Gran Bretaña en 1939, luchó con la Legión Extranjera. Con la caída de Francia, tras escapar de los alemanes, trabajó supuestamente en la fabricación de gasolina para el Régimen de Vichy, que posteriormente ofreció al MI15. Kopp condicionó su colaboración a que el Servicio Secreto Británico le enviara fondos para pagar deudas. En 1943 los informes sugieren que para entonces trabajaba para el MI5, aunque su relación exacta con ellos no está clara[88].

Con el fin de la Segunda Guerra Mundial, muchos antiguos voluntarios del POUM volvieron a las actividades políticas y sindicales[89] de antes de la guerra o, en algunos casos, revivieron sus carreras como escritores y artistas. Orwell, tras alistarse en la Guardia Nacional y trabajar para la BBC durante la guerra, se estableció como uno de los escritores más importantes del mundo.

Jean Malaquais (Malacki) publicó su famosa novela Plànete sans visa sobre el exilio en Mar-seille durante la guerra. Karl Heidenreich vuelve a pintar y gana el Premio de Acuarela de 1961. Benjamin Peret y Olga Loeuillet (Monskheli Preiss) siguieron activos en el movimiento surrealista[90].

Sin embargo, después de 1939 no hay rastro de los antiguos voluntarios internacionales del POUM. La guerra y la represión se cobraron su precio. Ellos y la causa a la que sirvieron merecen ser salvados del olvido.

Notas

[1] Se calcula que un tercio de los brigadistas internacionales murieron ÁLVAREZ, S., Historia política y militar de las Brigadas Internacionales (Madrid 1996) pp398-399; un centenar del contingente extranjero del POUM cayó en combate según Víctor ALBA, El Marxismo en España (1919-1939) tomo II (México 1973) p369.

[2] . La Vanguardia 24.7.36; ¡Avant! 26.7.36; la Columna estaba inicialmente comandada por Jordi Arquer y el líder minero asturiano Manuel Grossi, con el ex sargento del ejército Francesc Piquer como asesor militar. Otras tres columnas del POUM saldrían de Barcelona a lo largo del mes siguiente: el 29 de julio, el 8 de agosto y el 29 de agosto; también se organizaron dos columnas más desde Lérida; las columnas de Tarragona, Castelló y Valencia partieron hacia el frente de Teruel.

[3] Sobre el IBRSU ver DURGAN, A., Comunismo, revolución y movimiento obrero en Cataluña 1920-1936. Los orígenes del POUM (Barcelona 2016) pp311-314.

[4] El SAPD se había escindido en 1931 con el SPD por su apoyo al gobierno de la derecha y su fracaso en la construcción de un frente unido obrero contra el fascismo.

[5] Los miembros fundadores del KPD(O) habían sido expulsados en 1928 del KPD por ser partidarios de Nickolai Bujarin; también defendían la necesidad de un frente único antifascista; bajo el impacto de la Guerra Civil española evolucionarían hacia un antiestalinismo militante y en 1938 se unirían al IBRSU. En Barcelona, el grupo del KPD(O), mayoritariamente judío, gravitaba, al igual que otros refugiados no asociados al KPD, en torno al quiosco de la plaza Catalunya que vendía literatura antifascista, dirigido por los miembros del KPD(O) Ewald y Ella König.

[6] El periodista italiano y miembro del PSMI, Bruno Sereni, que vivía en Cataluña desde 1933 trabajando como vendedor a domicilio, resultó gravemente herido y se convirtió en la primera víctima extranjera del POUM; véanse sus memorias, SERENI,B., Ricordi della Guerra di Espagne (Barga 1972).

[7] STANSKY, P. y ABRAHAMS, W., Viaje a la frontera. Two roads to the Spanish Civil War (Bos-ton 1966) pp311-346; F. Borkenau, The Spanish Cockpit (University of Michigan 1974) p108.

[8] Brodiga había sido uno de los fundadores del PCI en 1921; en 1926 se separó del partido con sus partidarios. Su programa político se centraba en el rechazo del concepto de «socialismo en un solo país» y de cualquier sugerencia de que hubiera alguna diferencia entre la democracia liberal y el fascismo, ya que ambos eran formas de dominación burguesa. De ahí que su facción rechazara el «antifascismo» por considerar que sólo reforzaba el capitalismo. Por el contrario, defendían el programa fundacional de la Comintern y la necesidad de luchar contra todas las formas de oportunismo. En los años treinta, la mayor parte de la Facción estaba exiliada en Bélgica y Francia y ya no estaba en contacto con el propio Bordiga, quien, tras un periodo en prisión, se había retirado de toda actividad política[9].

[9] Trotsky había roto con sus antiguos seguidores españoles que, tras unirse al Bloque Obrero y Campesino para formar el POUM en septiembre de 1935, habían firmado el pacto electoral del Frente Popular a principios de 1936; para una valoración crítica de las relaciones de Trotsky con el POUM, véase A. DURGAN «Marxism, War and Revolution: Trotsky and the POUM» Revolutionary History vol. 9, nº2 (Londres 2006).

[10] Russo fue sargento del ejército italiano durante la Primera Guerra Mundial y más tarde miembro destacado de la facción bordiguista en el exilio.

[11] El antiguo miliciano anarquista Pedro Torralba elogió el valor y la eficacia de las milicias del POUM en la defensa de los sectores «más difíciles y peligrosos» del frente, TORRALBA, P., De Ayerbe a la Roja y Negra (Edición del autor, 1980) pp146-7; Alba describió Casestas de Quicena, donde se encontraba la Agrupación Internacional, como la «parte más peligrosa del frente», ALBA op. cit. p369; el comandante de los fascistas atacantes Coronel Alfonso Beorlegui describió la moral de los defensores de Casetas de Quicena como «extremadamente alta», ARCARAZO, L.A., BARRACHIN, P. y MARTINEZ, F., Guerra civil de Aragón. Huecas ‘el cerco’ Zaragoza 2007 p151; el POUM afirmaría posteriormente que sufrió seiscientas bajas en el frente durante septiembre de 1936, Frente (Terrassa) 28.5.37.

[12] Entre los voluntarios internacionales muertos estaba Franz Maizan, de diecinueve años, antiguo miembro de la milicia socialista austriaca Schutzbund.

[13] Vil alba era comandante del cuartel de Barbastro; no está claro hasta qué punto estuvo implicado en la trama militar, probablemente la llegada de los milicianos del POUM el 25 de julio le inclinó a favor de la República, MALDONADO, J.M., El frente de Aragón. La guerra civil en Aragón (1936-1938) (Zaragoza 2007) pp83, 106, 132; BENITO, M., Orwell en las tierras de Aragón (Sariñena 2009) pp19-20.

[14] ALBA, op. cit. p369 dice que había 500 en enero; el antiguo miliciano del POUM Albert Masó creía que nunca había más de 400 en un momento dado, carta al autor 20.11.97; otro dirigente del POUM Carmel Rosa afirma que había 300 extranjeros con la milicia del POUM, ROSA, C., Quan Catalunya era revolucionaria (I feia la guerra) (Girona 2008) p339; un miliciano alemán informó que los extranjeros constituían el 10% de la milicia del POUM, BUSCHAK, W., «El POUM y el movimiento obrero internacional» s.f.

[15] Además de Cornford, cuatro jóvenes comunistas franceses se unieron a la columna del POUM en septiembre de 1936, tres de los cuales morirían en los combates de Quicena; los anarquistas italianos Giuseppe Borgo, Pasquale Fioravanti y Mario Traverso formaban parte del Grupo Internacional Lenin.

[16] Por ejemplo, los hermanos Gottfried y Rudolf Kahn, exiliados judíos alemanes que se unieron al POUM por pura casualidad, véase el relato novelado de su estancia en España, SIMONS, P.L., Brothers on the run. Fleeing Hitler, Fighting Franco (North Charleston 2013).

[17] Esta información se basa en múltiples fuentes, entre ellas: la prensa del POUM, del IBRSU y de los trotskistas; AUSIN HERVELLA, J.L., «Milicians del poum -segons dades de microfilms de l’ANC» docs.google.com; ABEL, W. y HILBERT, E., «Sie werden nicht durchkommen» Deustche an der Seite der Spanischen Republik und der sozialen Revolution (Auflage 2015); Associazione Italiano Combattenti Volontari Antifascista di Spagna (AICVAS), La Spagna nel nostro cuore 1936-1939. Tre anni di storia da non dimenticare Roma 1996 aicvas.org; Nederlandse vrijwilligers in de Spaanse Burgeroorlog spanjestrijders.nl; HALL, C., In Spain with Orwel . George Orwell y los voluntarios del Partido Laborista Independiente en la Guerra Civil Española (Perth 2013); Le Maitron. Dictionnaire biographique du mouvement ouvrier français (1964-1997); se ha localizado información adicional en el CDHM (Salamanca) y en el Archivo de las Brigadas Internacionales (RGASPI).

[18] Orwell dice que había «varios cientos de alemanes sirviendo con el POUM», ORWELL, G., Orwell in Spain (Londres 2001) p67.

[19] AUSIN HERVILLA, J.L., op. cit; además de los miembros de la Gauche revolutionnaire, entre los voluntarios franceses había militantes de los dos partidos trotskistas, el Parti ouvrier internationaliste y el Parti Communiste Internationaliste disidente.

[20] DE BEULE, N., «Met de loupe op zoek naar de Belgische Trotskisten in de Spaanse arena» (1987) journalbelgianhistory.be

[21] Descrito a menudo como el «Orwell francés», Malacki había emigrado a Francia en 1925. Su primera y aclamada novela, Les Javanais, se basaba en sus experiencias como minero; escrita en 1935, no se publicó hasta 1939, cuando ganó el premio Renaudot.

[22] Peret había sido uno de los fundadores del movimiento surrealista en Francia y más tarde se convirtió en trotskista.

[Heindereich había sido delegado en el Consejo de Obreros y Soldados de Munich en 1918. Con la llegada al poder de los nazis, trescientos de sus cuadros fueron destruidos por considerarlos «arte degenerado» [26].

[26] GOVAERTS, B., «George Kopp: De vreemde voetnoot in een beroemd leven» Vrij Nederland 24.8.85; B. Govaerts, «Comandante Georges Kopp (1902-1951). De Belgische vriend van George Orwel» (2007); WILDEMEERSCH, M., George Orwel ‘s Commander in Spain. The Enigma of Georges Kopp (Londres 2010).

[27] Álvarez organizó la primera unidad de zapadores de las milicias del POUM.

[28] Hartmut era un oficial de la artillería del POUM.

[29] Girelli, albañil de Brescia, fue a Madrid con el 2º Batallón de la Columna Joaquín Maurin en octubre de 1936 al mando de la unidad de pontones.

[30] Moner comandó una Centuria en la Columna Joaquín Maurin en Tierz.

[31] Lewinski era judío y había emigrado con su familia a París en 1925; sólo tenía veinte años (él decía que tenía 24) cuando Kopp le entregó el mando en noviembre de 1936.

[32] Schwarz, miembro del KPD(O), había ido a Barcelona en 1932 y era secretario del POUM en el barrio de Gràcia.

[33] Margolin fue autora en 1923 de un influyente estudio, basado en su Tesis Doctoral, sobre el comportamiento del sistema nervioso de los enfermos de carcinoma.

[34] Tras la Guerra Civil, Fienga se fue a México, donde se convirtió en el médico personal tanto del presidente Lázaro Cárdenas como de León Trotsky.

¡[35] Según Avant! 25.7.36. la primera Columna del POUM estaba dotada de un servicio médico de dos ambulancias, dos médicos, cuatro ordenanzas médicos tres enfermeras y seis camilleros; testimonios directos consideran que los servicios médicos del POUM eran muy precarios: ORWELL op.cit p282; GROSSI, M., Cartas de Grossi (Sariñena 2009) pp57-8; LAUFER, E., «Un comunista alemán en la guerra civil española» ¿Qué sigue? No.13, 1999.

[36] Thalmann había viajado a España, donde se unió a su compañero Pavel Thalmann, como parte del Club Obrero de Natación de Suiza para participar en las Olimpiadas Populares.

[37] Según el POUM, Zimbal «luchó como un hombre, apuntó con su fusil y disparó sin descanso, impasible ante las balas fascistas… se expuso constantemente para rescatar a los heridos… Era el prototipo de la mujer revolucionaria.. femenina pero fuerte, valiente, heroica..»
Front (Sitges) 25.10.36; La Vanguardia 23.10.36; Spanish Revolution 2.12.36; ver también CASTELLVÍ, O., De les txeques de Barcelona a l’Alemanya nazi (Barcelona 2003) p41-43; según el diario del POUM La Batal a unas 100 mujeres participaban regularmente en estos entrenamientos, La Batalla 8.1.37.

[38] Por ejemplo según José Mª Maldonado el POUM «huyó de la disciplina tradicional y de obedecer a los mandos militares o civiles» MALDONADO op.cit p38. Sobre la política militar del POUM ver TOSSTORFF, R., El POUM en la revoució espanyola (Barcelona 2009) pp155-171; y el informe de la Conferencia Militar del POUM en, Lérida, 17-19 de enero de 1937, La Batalla 23.1.37; 24.1.37.

[39] A principios de 1937 había supuestamente 42.466 hombres en las fuerzas republicanas en el frente de Aragón, con 132 piezas de artillería; la 5ª División rebelde en abril de 1937 tenía 42.873 efectivos, 6.182 en el sector de Huesca, y 131 piezas de artillería, MALDONADO op. cit. pp143-145.

[40] Rovira fue anteriormente jefe de los grupos paramilitares de autodefensa del POUM.

[41] ORWELL, op.cit pp318-320; según Josep Pané, comisario político de la milicia del POUM, la gran presencia de miembros del partido, alrededor del 80% al principio, reforzaba la disciplina, COLL, J. y PANÉ, J., Josep Rovira. Una vida al servei de Catalunya i del socialismo (Barcelona 1978) p114; la prensa del POUM desde muy pronto estaba llena de llamamientos para mejorar la disciplina, por ejemplo «Instruc-ciones que se han dado a sí mismas las milicias del POUM en campaña» La Batal a 8.8.36.

[42] «Tres meses en el Frente de Huesca», La Guerra Civil Española. The view from the Left, Revolutionary History Vol.4, Nos. 1/2, (Londres 1992); Josep Guarner, Jefe del Estado Mayor del Ejército de Cataluña, al ser interrogado en el juicio de la dirección del POUM en noviembre de 1938, declaró que no tenía conocimiento de ninguna queja sobre las fortificaciones en las posiciones ocupadas por la milicia del partido, El proceso del P. O.U.M. Documentos Judiciales y Policiales (Barcelona 1989) p411; Orwell admitió que las líneas estaban a menudo cerca frente a Huesca, ORWELL op. cit. p281; Front (Terrassa) 24.12.36. describió que las líneas estaban a sólo cincuenta metros de distancia frente al Manicomio.

[43] Hasta finales de marzo se siguieron utilizando las antiguas denominaciones; luego la Columna Maurin pasó a ser el 1º Regimiento, la Columna Pedrola el 2º y la JCI y Lobo el 3º; para la distribución de las fuerzas del POUM ver: Cuartel General del Frente de Aragón. Estado Mayor, 3ª Sección Sariñena, marzo 1937, «Operaciones. Plán de operaciones sobre Huesca» AHM Caja 786, 2.

[44] «Líneas generales de la organización de las fuerzas que guarnecen la región catalana» Documento 0297, Fundación Anselmo Lorenzo; un informe fascista de marzo de 1937 afirmaba que la División Lenin constaba de 7.300 hombres, con 80 ametralladoras, y dieciocho piezas de artillería, 5ª División Orgánica EM «Parte informativa correspondiente del día 22 de marzo de 1937» AHM Caja 2417,11.

[45] José Mª Maldonado estima que, dada la falta de hombres y armas adecuadas y la fortaleza de las defensas enemigas, era «casi imposible» que las fuerzas republicanas en el frente de Aragón tomaran las posiciones del enemigo, MALDONADO op.cit. p94; Waldemar Bozle hace un comentario similar en «Tres meses..» op.cit. pp294-5;

[46] «Líneas generales de la organización de las fuerzas que guarnecen la región catalana» Doc 0297, Fundación Anselmo Lorenzo ; MALDONADO op.cit. pp511-513.

[47] MALDONADO, op.cit. pp169-170; 516-518; Vicenç Guarner declaró que nunca vio una Brigada Mixta completa en el frente, GUARNER, V., Cataluña en la guerra de España (Madrid 1975) p.225.

[48] Los Regimientos 1º y 3º se unieron para formar la 128ª Brigada Mixta y el 2º Regimiento se convirtió en el 129º.

[49] El representante de la ILP en Barcelona, John McNair afirmó que había doscientos inscritos por venir, La Batalla 1.4.37.

[50] La mayor parte de esta información se puede encontrar en HALL op. cit; en mayo de 1937 Orwell estaba a cargo de treinta milicianos «ingleses y españoles», ORWELL op.cit p50.

[51] LARGEAUD, B., La perception des volontaires britanniques de la guerre ‘Espagne, de la surveil ance à la redécouverte Université Paris Sorbonne – Paris IV, UFR d’Histoire, September 2013 p114

[52] . Bilan 22.10.36.; para un relato detallado de la crisis ver GUILLAMON, A., Documentación histöri-ca del trotquismo español (1936-1948) (Madrid 1996); ROSES, S., Els revoulucionaris marxistes a l’Espanya del anys 30, Tesi Doctoral, Facultat de Geografia i Historia Contemporànea, Universi-tat de Barcelona, Maig de 2017, pp305-354.

[53] Russo firmó el 28.1.37. para el cobro de sus salarios desde el 1.12.36. hasta el 15.1.37; ANC 1-1-T-6489/824; al menos otros dos Bordigsts siguieron luchando: Emilio Lionello; se reenganchó a las milicias del POUM en la Columna Miguel Pedrola, y volvió al frente el 16.11.36., firmó el 7.1.37. por sus salarios del periodo 16.11.36. al 31.11. 36 ANC 1-1-T-6436/421-422; Gildo Belfiore se incorporó posteriormente a las Brigadas Internacionales, Associazione Italiano Combattenti Volontari Antifascista di Spagna (AICVAS) La Spagna nel nostro cuore 1936-1939. Tre anni di storia da non dimenticare Roma 1996 aicvas.org

[54] Un informe fascista describe que el batallón estaba formado por milicianos «bien entrenados y bien armados, fanáticos especialmente elegidos» «Informe sobre el ataque del día 17 de la actual posición número dos» 21.3.37. AHM 1299,53.

[55] Estos fueron fabricados en un taller de Lleida y «provocaron cierta admiración y respeto» entre el resto de la División Lenin, COLL, op. cit. p119; Grossi describió al Batallón como «la unidad mejor vestida y más disciplinada del frente» GROSSI, op.cit. p99.

[56] A. FORNER «El Batallón de Choque Rovira» Juventud Comunista 13.5.37; según Orwell los alemanes «no hablaban una palabra de inglés, francés o español» ORWELL, op. cit. p83.

[57] El «heroísmo» del Batallón sería atestiguado más tarde por el jefe de las milicias de la CNT, Miguel García Vivancos, «Informe» 21.7.37. FAL; El voluntario holandés Anton Van de Berg recordó que participó en una docena de atentados como miembro del Batallón, spanjestrijders.nl

[58] GUARNER, op. cit. p259; el Comunicado Oficial del Ejército Republicano 7.1.37. afirmaba que los milicianos habían capturado un cañón, una ametralladora, un mortero, veinte fusiles, 30 cajas de munición y cinco prisioneros, y que el enemigo había dejado cincuenta muertos, Servicio Histórico Militar, Partes Oficiales de Guerra: 1936-1939 vol. II (Madrid 1978) p.168. Entre los muertos se encontraban los alemanes Adolf Hess (18 años) y Rudolf Hable (19); y el suizo Gregor Bobilof (21); La Batalla 13.1.37; Impuls 26.3.37; HUBER, P., Los voluntarios suizos en la guerra civil española Guadalajara 2011) p142.

[59] Entre los muertos estaba el miembro del SAPD Ewald Linke; La Batalla 26.2.37; 2.3.37; Juventud Comunista 4.3.37; 20.5.37; Alerta 4.3.37.

[60] Cuartel General del Fente de Aragón. Estado Mayor, 3ª Sección, Sariñena, marzo 1937, «Operaciones. Plán de operaciones sobre Huesca (marzo 1937)» AHM Caja 786,2.

[61] La versión de los hechos del POUM se puede encontrar en: La Batalla 18.3.37; 20.3.37; 29.4.37.; Adelante 19.3.37; 2.4.37; la versión oficial republicana en Partes Oficiales.. op.cit vol. II, p248; L a Vanguardia 18.3.37; la versión fascista en: Ejército del Norte. Quinta División, «Parte del combate librado el día 17 de marzo de 1937 en Huesca» AHM Caja 1315,34.; 5ª División Orgánica Estado Mayor, «Parte informativa correspondiente del día 22 de marzo de 1937» AHM 2417,11.; también ver ARCARAZO, op.cit. pp238-239.

[62] Las cifras del POUM se pueden encontrar en: La Batalla 20.3.37; 21.3.37; L’Espurna 9.4.37; Frente Proletario (1938); según los fascistas el Batallón fue «destruido» perdiendo entre 60 y 45 combatientes, incluido su comandante Reiter, «Parte del combate.. » op.cit; «Parte informativa..» 22.3.37. op.cit; «Información sobre el ataque enemigo del 17 de marzo 1937» AHM c1299, Cp53.

[63] ORWELL, op. cit. pp76-88; ARCARAZO, op.cit. p272; MALDONADO, p76; COLL, op. cit pp146-147; GUARNER, op.cit. p265; Spanish Revolution 21.4.37; Adelante 16.4.37; La Batalla 14.4.37; 24.4.37.

[64] Por ejemplo, el PCE calificó al POUM de «línea de avanzada del fascismo» en la zona republicana y llamó a su «exterminio», Mundo Obrero 29.1.37 ; el periódico de la XIV Brigada Internacional afirmaba que tras el juicio de Moscú «el mundo entero puede ver» que los trotskistas eran «agentes del fascismo germano-japonés… un increíble sistema de provocaciones, sabotajes y asesinatos» y en España se habían revelado como «la bruma artificial que ocultaba a la Quinta Columna de Franco». El «desenmascaramiento de los trotskistas», afirmaba, unió a todos los voluntarios de las Brigadas Internacionales, Soldado de la República 16.2.37.

[65] ALBA, op.cit p406; según el NKVD, al menos treinta y siete milicianos extranjeros del POUM fueron enviados a participar en el «golpe» de mayo, 30.6.37. RGASPI (gracias a Peter Huber por facilitar una copia de esta información); Reiter fue acusado posteriormente por el KPD de haber participado en los combates de mayo al frente de una «unidad de veinte efectivos de las tropas de choque»; ABEL op.cit. p406.

[68] COLL, op.cit, pp163-173; BARULL, J., El Bloc Obrer I Camperol (Lleida 1919-1937) (Lérida 1990) p.112 El proceso… op.cit pp 412, 494-6, 503-4, 511, 519; TORRABLA, op.cit pp115-116; BOZLE «Three months… op.cit p. 289; «El Comité Executiu del POUM dona orders de que no vinguin a Barcelona forces del front» Declaración 6.5.37.(Biblioteca de la Republica, Barcelona); Adelante 7.5.37.

[71] Ejército de Este, Estado Mayor, «Orden General de Operaciones nº10» 13.6.37. AHM C581. 19/3; ARCARAZO, op.cit p314; ALBA, op.cit p537; FERNÁNDEZ JURADO, R., Memorias de un militante obrero (Barcelona 1987) pp242-3; COLL, op.cit p178.

[72] 5º Cuerpo de Ejército, División 51 E.M. 2ª y 3ª Sección, «Ataques realizados en el frente de la División en los días 12 al 19 de junio» AHM Caja 2100,18.; «Jefe Estado Mayor del Ejército del Este al Jefe Estado Mayor Central Coronel Rojo» 16.6.37. CDMH Incorporados 688; Coronel Jefe Frente a Jefe Operaciones Estado Mayor Central – «Parte de novedades del día 20 de junio 1937» Sariñena 20.6.37. CDMH Incorporados 688; Diario de Operaciones del Mehal-la Jalifiana del Rif nº5, AHM Caja 2682,21; COLL, op cit. pp189-200; ARCARAZO, op.cit. p305.

[73] Fuentes republicanas afirmaron que las fuerzas del POUM sufrieron un 40% de bajas, Coronel Jefe Frente a Jefe Operaciones Estado Mayor Central – «Parte de novedades del día 20 de junio 1937» Sariñena 20.6.37. CDMH Incorporados 688; el comisario político Josep Pané, que participó en los combates, afirmó que perdieron «la mitad» de sus tropas, COLL, op. cit. p196; según Orwell murieron «de cuatrocientos a seiscientos», ORWELL, op.cit, p288; la JCI dio una cifra de trescientos, Juventud Obrera 12.7.37.

[75] Se ha podido identificar a cuarenta y cuatro voluntarios del POUM que sirvieron en las Brigadas Internacionales. Los alemanes Karl Schneider-Neuser, Walter Theis y Otto Töwe fueron considerados sospechosos como antiguos milicianos del POUM y encarcelados por las Brigadas.

[76] BUCHANAN, T., «The Death of Bob Smillie, the Spanish Civil War, and the Eclipse of the Independent Labour Party» The Historical Journal Vol. 40, No. 2 (Jun., 1997), pp. 435-461; NEWSING-ER, J., «The Death of Bob Smillie» The Historical Journal 41, 2, 1998, pp575-578.

[77] Sobre la huelga de hambre véase PAGÈS, P., La presó model de Barcelona. Història d’un centre penitencia-ri en temps de Guerra (1936-1939) (Barcelona 1996) pp389-390; sobre las delegaciones y las condiciones de los presos: La Batal a 11.9.37; 25.9.37; 2.10.37; 20.12.37; 6.1.38; «La ayuda roja del POUM» Informe de la Delegación Exterior del POUM en París, agosto de 1938 (Biblioteca del Pavelló de la Republica, Barcelona).

[78] RGASPI Opis 6/359; sobre Reiter y la 97ª Brigada Mixta véase: CDMH, PEST 329, Exp 21392, Fol 2; CDMH, PEST 337, Exp 21934, Fol 2.

[79] Kopp como «Capitán, Estado Mayor, XII Brigada Internacional», Albacete 7.7.37. (CDMH Serie Militar, Carpeta 1061-2, Fol 92) y 17.7.37. (CDMH Serie Militar, Carpeta 1061-3 [sin fol]); sobre Kopp y los combates en torno a Chimillas: ORWELL op.cit. p325

[80] Frankford había sido detenido con otro miembro del contingente del ILP, James Cope, por robar cuadros. Las acusaciones de Franford fueron ampliamente difundidas en la prensa comunista y de las Brigadas Internacionales, por ejemplo Daily Worker 14.6.37, 16.6.37; The Volunteer for Liberty 13.9.37; SORIA, G., Trotskyism in the Service of Franco (Londres 1938) pp.40-42; Frankford admitió muy tarde que había mentido: J. Meyers «Repeating the old lies» The New Criterion 1999 orwell.ru

[81] HUBER, P., Los voluntarios suizos en la guerra civil española (Guadlajara 2011) pp125-127.

[82] ORWELL, op.cit. pp324-325; WILDEMEERSCH op. cit. pp63-66; «El nuevo crimen que se prepara; Jorge Kopp» La Batalla 6.11.37. Solidaridad Internacional Comité de Ayuda del POUM (París) s/d. (1938) dice que fue liberado el 20 de diciembre.

[83] Narwicz, oficial de las Brigadas Internacionales, se había infiltrado en el POUM haciéndose pasar por disidente ruso; fue ejecutado por un escuadrón de acción del POUM en venganza por la muerte de Nin, GUILLAMON, A., El terror estalinista en Barcelona 1938 ( Barcelona 2013) pp269-301; Zannon, de padres italianos, nació en Barcelona.

[84] BOWKER, G., George Orwell (Londres 2003) p220; Schneider fue diputado en el Reichstag en 1924 y más tarde ciudadano soviético, posteriormente fue denunciado por la Abwehr del KPD como agente de la «Gestapo» y de haber estado «probablemente» en la milicia del POUM, desapareció en 1938, ABEL, op.cit, p454; Swarze fue supuestamente agente del KPD en la Comisión de Cuadros del PSUC y trabajó dentro del «Batallón Internacional» del POUM, ibíd p470.

[85] Eberle desapareció en julio de 1939 tras presentarse supuestamente en la embajada alemana en París; ABEL, op.cit. , p127.

[86] Margolin fue detenida durante ocho días por la policía franquista en junio de 1940, después de lo cual no hay rastro de ella; Hoffmann fue detenido en 1943; posteriormente liberado se fue a vivir a Italia en 1946. Otro antiguo voluntario del POUM, el polaco Abraham Lichten, figuraba entre los cinco mil judíos de la capital barcelonesa en 1945, mozaika.es

[87] El alemán Adolph Bresmann luchó con la Legión Extranjera francesa y finalmente con el ejército británico en el norte de África; el miembro del RSAP Theo Jansen, tras escapar de la organización laboral nazi Todt en Noruega, se alistó en la Brigada Princesa Irene holandesa del ejército británico; Wladamir Malacki y Giuseppe Pizzala también se alistaron en el ejército francés al principio de la guerra.

[88] Una vez más, las pruebas sobre Kopp son muy contradictorias, véase WILDEMEERSCH, op. cit., pp. 77-90.

[89] Por ejemplo, Peter Blachstein volvió al SPD y fue diputado del Budestag alemán de 1949 a 1968; el antiguo líder del Contingente del ILP, Bob Edwards, fue diputado laborista de 1955 a 1987.

[90] Por ejemplo, Surrealisme, art moderne et art contemporain. Collection Olga Preiss Loeuil et 1907-2002 (París 2005).

[Traducido por Jorge JOYA]

Original: theanarchistlibrary.org

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Fuente → libertamen.wordpress.com

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