1. ¿Qué tienen en común Francisco
Correa y Juan Carlos de Borbón? Lo mismo que une a toda la gran
delincuencia de altos vuelos: la banca suiza y sus intermediarios. Arturo Fasana, en este caso concreto,
el mismo gestor al que el jefe de la Gürtel confiaba su dinero, por la
garantía que le daba su cliente más exclusivo: 'el rubio', como llamaban
algunos al rey Juan Carlos de Borbón.
2. El 1 de mayo, día mundial del Trabajo, conocimos una nueva andanza del emérito español. Una tremenda noticia –adelantada, sin darle mucha relevancia, por El País–
que la mayor parte de la prensa en sus portadas escondió, y que algunos
ni siquiera publicaron. Arturo Fasana confesó ante la Fiscalía suiza
que el rey le visitó en su casa de Ginebra el 7 de abril de 2010 para
que ingresara en su cuenta una maleta cargada de billetes: 1.895.250
dólares en efectivo que –según las explicaciones de Fasana– el rey había
conseguido de un 'donativo' de su amigo Hamad bin Isa Al Jalifa, el rey
de Baréin. No se sabe a cambio de qué.
3. Para los que se pierden con las grandes cifras: 1,9 millones de
dólares son alrededor de nueve años de ese sueldo público que le
pagábamos al rey emérito. Esa propinita (194.232 euros anuales) que,
hace unas semanas, su hijo Felipe VI le quitó.
4. ¿Cuánto pesan
1,9 millones de dólares? ¿Cuánto mide? Para la gente común, el dinero
ocupa poco en la cartera y se suele terminar con rapidez. Pero el tamaño
importa y se convierte en un problema cuando los ceros pasan de seis,
como bien saben todos aquellos que mueven grandes cantidades de
billetes: los corruptos, los narcos, los ladrones, los jeques árabes… o
–presuntamente– el rey Juan Carlos de Borbón.
5. Un billete de
cien dólares mide 15,95 centímetros de largo por 6,62 de alto y pesa
apenas un gramo. 10.000 dólares son cien gramos: es un fajo de alrededor
de 1,5 cm de grosor, algo menos si se trata de billetes sin usar.
Un
millón de dólares, en billetes de cien, pesa diez kilos y ocupa
alrededor de 15 litros de volumen. Cabe en un maletín de mano. Pero para
transportar 1,9 millones de dólares –19 kilos de peso– necesitas
alrededor de 30 litros. Es justo el tamaño habitual de una maleta de
cabina, de esas con ruedas que no hace falta facturar.
6. El rey
Juan Carlos de Borbón viaja con pasaporte diplomático. En el Falcon
oficial o en avión privado, como los que le pagaba su primo y presunto
testaferro, Álvaro de Orleans. Sin pasar por los controles y registros
de sus súbditos. Por la terminal de autoridades. Sin dar explicaciones
sobre qué lleva con él.
7. Esa supuesta maleta llena de billetes,
donada por el rey de Baréin, no es el único ingreso más que sospechoso
que investiga la justicia suiza en las cuentas ocultas de Juan Carlos
Borbón; las mismas en las que su hijo Felipe VI aparecía como futuro
beneficiario, una herencia a la que el rey Felipe se comprometió a
renunciar cuando estalló este escándalo. También están esos otros cien millones de dólares
que le ingresó el sultán de Arabia Saudí. Tampoco está muy claro a
cambio de qué. Aunque la Fiscalía suiza sospecha que pueda tener
relación con los contratos del AVE a La Meca. Unos presuntos sobornos
que también investiga la Audiencia Nacional.
8. La fecha de este
nuevo 'donativo' del golfo pérsico es relevante, por varios motivos. Fue
el 7 de abril de 2010, en plena crisis económica. Cuando el desempleo
alcanzó los 4 millones de parados. Y en esa fecha, Juan Carlos de Borbón
era el jefe del Estado español. La máxima autoridad del país. Y por
tanto irresponsable penalmente, como establece la Constitución. Es
decir, que no se le puede condenar por los presuntos delitos que,
durante su reinado, haya podido cometer. Lo que vulgarmente llamaríamos
impunidad.
9. En la agenda oficial de Juan Carlos de Borbón no figura ningún acto público el 7 de abril de 2010. Ese día está despejado: el 6 estuvo en Zaragoza, en una base militar, y el 8 en una recepción en Zarzuela con el primer ministro del Líbano.
10. Unas semanas antes de esa supuesta reunión con Fasana, el 14 de marzo de 2010, también estuvo en Baréin: en la Fórmula 1. Es un viaje que no figura en la agenda oficial del rey, pero que sí dejó rastro en los medios de comunicación.
Fue un gran día para el piloto español, Fernando Alonso: ganó la
carrera en su debut con Ferrari. A juzgar por la confesión de Fasana,
también fue un gran día para el rey.
11. "Sigamos trabajando para
que la honradez sea regla inexcusable de conducta", decía el rey emérito
unos meses antes de presuntamente viajar con ese maleta llena de
dinero; durante su discurso navideño de 2009.
12. Otro discurso
del rey de España meses después, en la Navidad de 2010. "Es preciso
fomentar el ejercicio de grandes valores y virtudes como la voluntad de
superación, el rigor, el sacrificio y la honradez. Valores y virtudes cuya ausencia no es ajena al origen de la crisis". Tenía mucha razón.
13.
"La ley es igual para todos, y la ejemplaridad debe ser una meta para
los cargos públicos. Afortunadamente, vivimos en un Estado de derecho, y
cualquier actuación censurable deberá ser juzgada y sancionada con
arreglo a la ley", nos explicó el rey Juan Carlos en la Navidad de 2011,
cuando estalló el escándalo de su yerno, Iñaki Urdangarin.
14.
Que el rey tenía dinero escondido en Suiza era un secreto a voces. Lo
sabían muchos de los clientes de Fasana, que no eran pocos ni poco
importantes. Lo insinuó el propio Correa en varias ocasiones, como en la
confesión del jefe de la Gürtel que eldiario.es publicó en exclusiva hace ya cinco años. Lo sabían los grandes empresarios, los grandes banqueros, los principales políticos, los grandes medios de comunicación.
15. En la agenda oficial del rey Juan Carlos figura un viaje oficial a Suiza, en mayo de 2011. Durante esa visita,
definió a Suiza como "un país europeo con el que me siento ligado desde
mi infancia por entrañables recuerdos familiares". En efecto, la
familia Borbón ha estado muy ligada a Suiza: llevan tres generaciones escondiendo su dinero en este paraíso fiscal.
16.
Solo hay dos explicaciones racionales para guardar dinero en paraísos
fiscales, a través de testaferros y estructuras 'offshore': evadir
impuestos, o que el dinero sea de origen ilegal. En ocasiones, son ambas
cosas a la vez. Y es humillante que esta investigación sobre la
presunta fortuna oculta de Juan Carlos de Borbón la haya iniciado la
justicia Suiza, y no la española, cuando los damnificados somos los
súbditos del rey.
17. En cada discurso, en cada Navidad, el rey
Juan Carlos no paraba de recordar su amor a España, su solidaridad con
los españoles y su compromiso con la nación. Pero la lealtad a España se
declara en el IRPF, no frente a una bandera o en un discurso solemne
por televisión. No hay solidaridad más hipócrita ni patriotismo más
cínico que el de aquellos que loan su amor por España mientras esconden
su fortuna en un paraíso fiscal.
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