En Betanzos (A Coruña), los franquistas asesinaron a 34 republicanos. Víctimas posteriores al verano de 193

Durante muchos años en Betanzos se desconocía la identidad de las víctimas de la represión franquista. Muchos «paseados» sólo fueron conocidos por sus familiares y pocos amigos, vecinos o correligionarios, hablar era peligroso. En muchos casos las víctimas eran «paseadas» en lugares alejados que los familiares tardaron en averiguar. Varios fueron registrados como «desconocido», solo años después los certificados de defunción revelaron su verdadera identidad. Otros aún permanecen desconocidos, ni siquiera tienen un certificado de defunción.

Durante muchos años pocos betanceiros fueron conscientes de la magnitud de la tragedia, 34 betanceiros asesinados por los rebeldes fascistas:

– Tomás López da Torre («o Galo»), natural de Betanzos, 36 años, rico labrador, vendimiador. Era abogado y alcalde socialista, colaborador de la Irmandade da Fala. Aunque actuó de forma moderada, evitando excesos, fue sometido a la farsa de un juicio militar. El tribunal sedicioso le condenó a muerte, fue fusilado en el campo de la Rata de A Coruña el 1 de octubre de 1936.

– Manuel Allegue Regueiro, cabo de artillería de 24 años, natural de Betanzos, tripulante del torpedero T-2, fusilado el 5 de Octubre de 1936 por permanecer fiel a la República Española. 

– El 23 de Octubre de 1936, fueron “paseados” y asesinados juntos en las cercanías de Ordes, y encontrados en el «Pinar da Torre», parroquia de Parada: Germán López Pérez (O Marulán), labrador, 35 años, hijo de Antonio y Juana. Era inspector de arbitrios municipales afiliado a UGT, casado con María Martínez Antón, tenían 2 bebés. Su cuerpo fue encontrado bárbaramente mutilado; Y Francisco Barreiro Permuy (o Paragüero), 21 años, nacido en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra). Vivía en Betanzos con sus padres, Antonio y Josefa, y 3 hermanos. Era fotógrafo, militante en las Juventudes Comunistas. Recaudaba en especie el impuesto con el que el gobierno municipal del Frente Popular gravaba a los acaparadores de cereales. Le costó la vida. 

– José Carro Pena, jornalero de 30 años, de la CNT. Casado con Manuela Gómez Amor, tenían 4 hijos pequeños. Extraía arena de la ría con sus 2 barcos, ya había sido tiroteado por defender a los trabajadores. La noche del 27 de Octubre de 1936, unos guardias civiles fueron a buscarlo a su domicilio, siendo perseguido a tiros por las calles. Cayó herido, lo recogieron, lo llevaron al Crucero de Santiso, Abegondo (A Coruña), lo remataron y lo arrojaron a una cuneta. 

-Los 4 siguientes fueron sacados” de madrugada del cuartel de la guardia civil en Betanzos hasta la Casilla de San Paio, carretera de Betanzos a Ferrol, donde los mataron cobardemente. Uno más, Francisco Moreno Vilariño, pudo huir y sobrevivió: Bernardo Miño Abelenda, 69-70 años, natural de Betanzos, labrador, hijo de Benito y Dolores. Vivía con su mujer y otra familia. Activista de UGT y PSOE, era 2º Teniente Mayor. Fue oponente a la guerra de Marruecos; Antonio Lagares Gómez, 51 años, miembro del PSOE y UGT, activista en la Cooperativa Socialista y la Asociación de Agricultores de Betanzos. Casado con Josefa García Pandelo, tenían 3 hijos; Camilo Naveira Ferreño, 26 años, labrador y albañil de la CNT. Vivía con su madre viuda y 3 hermanos; Y Manuel Fernández Pérez, «o Chacho», 18 años, vivía con sus padres Manuel y María. Era mecánico, pertenecía a las Juventudes Comunistas. 

– Francisco Fraga García, “o Coducho”, 28 años, camarero, casado con Julia Fraga Vázquez, con 5 hijos. Era confederal. Fue detenido en Palavea (A Coruña) por la guardia civil, y juzgado por un tribunal militar sedicioso, acusado de y rebelión, fue asesinado el 24 de Noviembre de 1936 en A Coruña. 

– Manuel Muñoz Otero, 33 años, capitán de la Armada Republicana, casado con Pilar Vales Estrada, maestra nacional, tenía 3 hijos pequeños. Fue fusilado en «la Punta del Martillo de Ferrol”, tras haber sido juzgados por un tribunal sedicioso el 27 de enero de 1937 por haber permanecido fiel a la República.

– Aurelio Castillo Barreiro, el “Dandy”, 32 años, nacido en Santander. Era pintor, afiliado a la CNT. Casado con Consuelo Varela Ribas, tenían una hija de un mes. Participó en la resistencia del Arco da Ponte Nova. Detenido el 14 de abril de 1937, fue acusado de “rebelión” por un tribunal felón y asesinado por fusilamiento en A Coruña junto a otros 20.     

– José Maseda Vaamonde, “o Calderetero”, 29 años, activista de CNT y FAI. En julio de 1936 huyó de Betanzos. Fue herido y detenido por la guardia civil en noviembre de 1937 en Loureda (A Coruña). Sometido a una farsa de juicio por un tribunal golpista, fue asesinado en A Coruña el 26 de Enero de 1938.

– Celestino Veiga Álvarez, «Chevó», 23 años, Labrador. Había nacido en Buenos Aires, hijo de Andrés y Encarnación Álvarez Rojo. Era directivo local de la CNT. Huyó a las montañas con su padre, fueron capturados por unos falangistas y llevados a La Coruña; su padre fue liberado después de horribles torturas. Celestino fue juzgado por un tribunal sedicioso y asesinado en A Coruña el 18 de Noviembre de 1938.

 – José Vaamonde Valiño, Labrador de 46 años, casado con Carmen Romay Cortés, tenían 3 hijos pequeños. Afiliado a CNT, estuvo prófugo por las montañas casi toda la guerra. Encarcelaron a su esposa y él se entregó para que la soltaran pero la encerraron en el penal del Dueso. José fue juzgado por «rebelión» y el 20 de Noviembre de 1939 murió en la prisión de A Coruña como consecuencia del hambre y la miseria que padeció en prisión. 

– Manuel Veiga Vázquez, 24 años, natural de Betanzos, marinero. Acusado de “rebelión”, fue asesinado por fusilamiento en el arsenal de Ferrol, Ferrolterra (A Coruña) el 19 de Diciembre de 1936 y arrojado a una fosa común.

Sigue en Víctimas durante el verano de 1936

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Documentación: La Opinión A Coruña (1 y 2), Antares Pérez Betanzos. As vítimas betanceiras da represión (Xesús Torres Regueiro)

El Primer DNI Republicano