El legado obrero de la Brigada Lincoln

Inicié mis prácticas en los Archivos de la Brigada Abraham Lincoln (ALBA) en mayo de 2022 como parte del equipo del Proyecto de Renovación de Datos. Mi tarea fue actualizar la extensa base de datos de voluntarios e ingresar metadatos para revelar detalles y conexiones de los veteranos de Lincoln que antes no estaban al alcance de los investigadores. Tanto los estudiantes como los académicos podrán buscar por fecha de nacimiento, ocupación, universidad, afiliación política, el barco en el que navegaron a España y si murieron en acción, resultaron heridos en acción o se convirtieron en prisioneros de guerra. Esta posición fue una combinación perfecta para mí: un admirador de mucho tiempo de la Brigada Abraham Lincoln, un estudiante de historia cautivado por la Guerra Civil española y, más recientemente, un idealista fascinado por el movimiento obrero estadounidense y la izquierda combativa de los años 30. Esto hace que un trabajo ciertamente tedioso (editar miles de registros de Voluntarios) sea un trabajo de inmenso amor.

Los brigadistas eran increíblemente diversos y representaban el espectro completo de la comunidad estadounidense e internacional. Eran mayormente inmigrantes o hijos de inmigrantes. Eran afroamericanos, irlandeses, judíos, puertorriqueños, cubanos, canadienses, croatas, alemanes, italianos y rusos, solo por nombrar algunos. Algunos eran muy jóvenes, como descubrí la semana pasada cuando me topé con un brigadista que solo tenía 16 años. Y algunos tenían casi 60 años cuando se enfrentaron a la traicionera odisea de las montañas a través de los Pirineos para entrar en la lucha. Son impresionantes los valores, antecedentes y creencias que los unieron en la batalla contra el fascismo, unas creencias tan profundas que cientos pagaron con su sangre, tanto en España como durante la Segunda Guerra Mundial.

A medida que profundizaba en sus vidas, me llamó la atención una tendencia en particular: su huella imborrable en el movimiento obrero. Después de editar casi mil perfiles, era imposible ignorar el predominio de los Lincoln pertenecientes a Industrial Workers of the World (IWW), la Federación Estadounidense del Trabajo (AFL), el Sindicato de Empleados de Grandes Tiendas, Sindicatos Marítimos, Sindicatos de Maestros y muchos más. También noté una correlación entre la afiliación política y la actividad laboral; la mayoría de los Lincoln pertenecientes al Partido Comunista antes de 1936 tenían alguna participación en el movimiento obrero. Esto no es de extrañar: el Partido Comunista Estadounidense fue un firme aliado de la clase trabajadora y trabajó de la mano con otros grupos políticos de izquierda para mejorar las condiciones de los trabajadores.

Si bien hay muchos Lincoln que podrían mencionarse, destacaré dos que me llamaron la atención recientemente:

En 1932, un joven de 17 años llamado Irving Fajans tomó un trabajo en Macy’s, se unió a la Liga de Jóvenes Comunistas y se convirtió en organizador del Sindicato de Empleados de Grandes Tiendas. Era un líder que luchó para sindicalizar a miles de trabajadores minoristas mal pagados en toda la ciudad de Nueva York. Exigieron una jornada laboral de ocho horas, salarios más altos, mayores beneficios y muchos derechos ya garantizados por los sindicatos de cuello azul en todo el país.

Fajans se tomó un descanso del sindialismo para luchar contra el fascismo en España y luego nuevamente en Italia durante la Segunda Guerra Mundial; fue herido en ambos conflictos. Posteriormente, editó una antología sobre la Guerra Civil Española. Luego fue a la escuela de cine. En particular, trabajó con un grupo de cineastas de Hollywood incluidos en la lista negra para producir «Salt of the Earth», una película revolucionaria que representa la lucha de los mineros mexicano-estadounidenses durante una huelga en Nuevo México. Esta película fue prohibida en los Estados Unidos inmediatamente después de su estreno; sus temas «subversivos» de igualdad racial, de género y laboral eran demasiado «comunistas» para mostrarlos al público.

Nacido el Primero de Mayo de 1914, Ralph Fasanella empuñó el pincel del movimiento obrero, representando escenas por excelencia de la vida de la clase trabajadora en sus pinturas, desde escenas nocturnas de fábricas en Nueva York hasta la huelga de pan y rosas en Lawrence, Massachusetts.

En España, Ralph empuñó un rifle en la lucha contra el fascismo. Después de regresar a los Estados Unidos, se convirtió en organizador de United Electrical Radio y Machine Workers of America. De hecho, así fue como aprendió a pintar: en unas clases de arte organizadas por el sindicato. Esto parece novedoso ahora, pero en su apogeo, los sindicatos eran casas de cultura que ofrecían una variedad de clases y actividades comunitarias para los miembros.

Ralph pasó los siguientes 30 años trabajando en la gasolinera de su hermano, pintando religiosamente. A medida que crecía, Ralph visitó escuelas en la ciudad de Nueva York y habló con estudiantes de secundaria sobre pintura, sobre la lucha de la clase trabajadora y sobre la importancia de la herencia inmigrante de Estados Unidos. Una de sus pinturas cuelga permanentemente en el Gran Salón de Ellis Island.

Hubo muchos otros Lincoln involucrados en el movimiento obrero. Sin embargo, el trabajo de Fajans y las pinturas de Fasanella ofrecen poderosas representaciones de esperanza, de solidaridad obrera, de igualdad racial y de género, y del poder inquebrantable de una clase trabajadora unida. Estos dos hombres fueron unos luchadores hasta el día de su muerte. Encontré sus historias inspiradoras, especialmente en un momento en que la lucha de la clase trabajadora continúa, y se necesita desesperadamente un renacimiento del movimiento obrero para desafiar las graves desigualdades que asolan a nuestra nación.

Espero que, de alguna manera, mi trabajo en los Archivos de la Brigada Abraham Lincoln haga que sea más fácil para cualquiera llegar al pasado y descubrir sus historias. Espero que a muchos aspirantes a historiadores les ahorre horas de tiempo. Y espero que otros descubran lo que hice: el legado histórico y el sacrificio de la Brigada Abraham Lincoln nos ofrece un plan para construir un mundo nuevo.