Carta abierta a la Asociación de Aviadores Republicanos

A propósito de la ‘vandalización’ de estelas funerarias de pilotos nazis de la Legión Cóndor

Estas líneas son una carta abierta que remitimos a la Asociación de Aviadores Republicanos (ADAR) (1) a raíz de la publicación de una nota en la que expresaban su disgusto por la parcial destrucción de uno de estos memoriales. (2)

Hola compañeros de ADAR:

Con el debido respeto, tras la lectura de vuestra nota-denuncia, queríamos compartir con vosotros algunas consideraciones y vaya por delante, nuestro reconocimiento y admiración por todo el gran trabajo que habéis realizado y realizáis por la recuperación de la memoria de los Aviadores de la República Española a través de vuestra honorable Asociación.

Mezclar churras con merinas

Primero que nada, creemos que se están mezclando cosas muy diferentes.

Por un lado, la presencia de estelas funerarias (3) de la Legión Cóndor en espacios públicos y por otro, los sentimientos personales de un as de la Aviación Republicana que abogaba por la “Reconciliación Nacional” entre víctimas y verdugos, porque en eso consistía la mal llamada reconciliación nacional cuando Falcó la defendía.

Tratar de justificar lo primero con lo segundo, con todos los respetos, nos parece muy poco acertado, como así lo consideró el propio padre de Falcó (4), republicano represaliado que pasó un año en un campo de concentración en Málaga y cuatro en la cárcel de Figueres, así que, dentro de la misma familia y bajo la misma tricolor, al menos tenemos dos visiones opuestas y cada cual es libre de identificarse con la que más empatía le merezca a nivel personal, con la salvedad de que Falcó sufrió el exilio y pasó por dos campos de concentración en Francia y luego se exilió a Toulouse, y su padre, pasó por un campo de concentración franquista, por la cárcel y por la represión posterior.

Este republicano represaliado trató de derribar la “estela” a la que su hijo -Falcó- llevaba flores, pero se lo impidió, esgrimiendo el argumento de que “no es un monumento fascista, sino la lápida de un soldado muerto en la guerra”, aunque como veremos, esto no era ni es del todo digamos preciso, y por dos razones de peso.

Autopsia de una estela funeraria de un aviador de la Legión Cóndor

En primer lugar, la estela que nos ocupa estaba coronada con una gran 𝑅𝑖𝑡𝑡𝑒𝑟𝑘𝑟𝑒𝑢𝑧 𝑑𝑒𝑠 𝐸𝑖𝑠𝑒𝑟𝑛𝑒𝑛 𝐾𝑟𝑒𝑢𝑧𝑒𝑠. ¿Y eso qué es?, pues es la Cruz de Caballero de la Cruz Hierro, condecoración que en la Alemania nazi se otorgaba como reconocimiento a la valentía en el campo de batalla. Se concedió desde 1939 a 1945 y quien encargó la lápida tuvo el detalle de incluirla en el diseño, porque evidentemente sabía lo que hacía.

En segundo lugar, la primera parte del texto de la lápida que subrayamos, no deja lugar a dudas sobre lo que se quería poner en valor en el momento de colocarla:

“̲H̲i̲e̲r̲ f̲i̲e̲l̲ a̲m̲ 6̲.̲2̲.̲1̲9̲3̲9̲ i̲m̲ K̲a̲m̲p̲f̲ f̲ü̲r̲ e̲i̲n̲ n̲a̲t̲i̲o̲n̲a̲l̲e̲s̲ S̲p̲a̲n̲i̲e̲n̲ Friedrich Windemuth. Geb. 27.5. 1915 in Leipzig“.

¿No sabéis que quiere decir?, pues os lo traducimos: “AQUÍ CAYÓ EL 6.2.1939 EN LA LUCHA POR UNA ESPAÑA NACIONAL, FRIEDERICH WINDEMUTH NACIDO EL 27.5.1915 EN LEIPZIG“.

Estos dos detalles por alguna razón se han pasado por alto y hablan por sí solos del significado OBJETIVO de esta estela.

Y hablando de detalles: ¿os habéis fijado que precisamente la parte de la lápida que se ha derribado es la de la condecoración nazi y lo de “caído en la lucha por una España nacional”? Casualidad o no, la parte que han dejado es digamos la de la persona, pero no la que homenajeaba a un piloto nazi y a la razón que le llevó a invadir nuestras tierras.

Quizás quien la derribó si entendía el alemán. Lo mismo fue un aviador de La Gloriosa compañero de Falcó presente en el lugar de los hechos cuando la Cóndor bombardeó y ametralló el aeródromo de Vilajuïga en Gerona, o un familiar de algún Brigadista o quien sabe, hasta pudo ser un familiar del mismo Falcó que le hizo caso y no derribó la segunda parte.

Heinrich Windemuth y la 88

Apelar a los sentimientos “humanos” para abstraernos de la misión que Heinrich Windemuth, piloto del Messerschmitt BF 109 de la Legión Cóndor, cumplía en España, no es de rigor, habida cuenta del exitoso servicio que los pilotos de la Cóndor sin ninguna piedad, prestaron a Franco machacando a todas las Armas del Ejército Popular de la República que estuvieron a su alcance.

Legión Cóndor se denominó al Cuerpo de Voluntarios de la Luftwaffe alemana que invadió el espacio aéreo de un Estado soberano (La República Española) en auxilio a militares golpistas, traidores a su juramento, que desencadenaron una guerra que duró tres años y que el pequeño dictador prolongó 40 años más. A la Legión Cóndor, dentro de la Luftwaffe (literalmente «Arma Aérea» en alemán) se le asignó el número 88.

Curiosamente el número 88 es la abreviatura típica del saludo que recibía el Führer (¡Heil Hitler!), porque la letra H es el número 8 en el alfabeto alemán y qué menos que bautizar con él, a un cuerpo de élite nazi en el que depositaban tan altos horizontes.

La 88, se constituyó como una gran unidad con mando y personal propios, ya que se trataba de militares profesionales procedentes de la Wehrmacht, las Fuerzas Armadas de la Alemania nazi. Aunque en ocasiones es considerado erróneamente como un organismo exclusivamente aéreo, se encuadraron también en la Cóndor unidades de artillería antiaérea, cañones antitanques, tanques, transportes y elementos de tierra y de marina. (5)

Hitler el sucio

En la guerra contra España, sus pilotos adquirieron una gran experiencia y destreza siendo este el principal objetivo del acuerdo de Hitler con Franco para su presencia en España, ya que su propósito era utilizar esta fuerza para apoyar la “guerra relámpago” (Blitzkrieg) que Hitler planeaba como una apisonadora sobre Europa y tener preparada esta arma de ataque, con la suficiente capacidad ofensiva antes del inicio de la II Guerra Mundial que iba a provocar.

Hitler no jugó limpio nunca, y lo que pretendía era tener una aventajada fuerza aérea en lo tecnológico y en la preparación de sus pilotos respecto al resto de los estados soberanos que pretendía invadir, utilizando la guerra contra España como banco de pruebas. Esta es una de la razones por la que la creación y organización de la LEGION CÓNDOR se llevó por parte alemana en el más estricto secreto, hasta el punto de que, hasta bien entrado el año 1937, no se tuvo, en las fuerzas aéreas, el menor dato de su existencia. Consiguió perfectamente su objetivo y el éxito fue total, primero en España y después en Europa.

La Cóndor: pasión por el trabajo bien hecho

Se estima que la Cóndor derribó al menos a 235 aviones republicanos durante la guerra de España. Hizo historia por el “humanitario” bombardeo de Guernica en 1937 iniciando allí las pruebas de “bombardeos en alfombra” con bombas explosivas e incendiarias que después seguiría perfeccionando contra las acorraladas posiciones republicanas de El Mazucu (Asturies), donde «Los aviadores alemanes no consiguen bombardear con eficacia las posiciones republicanas enquistadas en los puertos de montaña, por lo que inventan una especie de napalm primitivo a base de sujetar latas de gasolina a las bombas incendiarias y a las de diez kilos.» (5) «Las bombas incendiarias, un precedente del napalm, queman la vegetación, las rocas y a los hombres» (6).

En busca de la Verdad, la Justicia y la Reparación

Quizás sea esa la razón por la que el Parlamento Asturiano aprobó en febrero de 2022 investigar la participación de la aviación nazi en la comunidad, con el resultado de la retirada de una lápida parecida a la que nos ocupa. Había dos más que en el 2016 ya fueron retiradas pues incluso la embajada alemana en España (que finalmente pidió perdón por los bombardeos en Asturias) lamentó que siguieran en pie, ya sabéis como se las gastan estos alemanes poniendo coto a la exaltación nazi en espacios públicos. Esta última lápida retirada el año pasado, está expuesta en el Museo Etnográfico de Grado, permitiendo comprender el contexto histórico en el que se produjo, que pilotos de un cuerpo de élite nazi, terminaran estrellados en las montañas Asturianas.

Nada menos que en Gandesa, la capital de la Terra Alta, cogieron la misma “manía” y en el 2016 el Ayuntamiento retiró la estela funeraria que en recuerdo del piloto de la Cóndor Heinz Willer, se ubicaba en el lugar donde cayó en 1938 durante la Batalla del Ebro. Esta pieza se depositó en el Centro de Estudios de la Batalla del Ebro (CEBE).

También en Madrid, su Ayuntamiento retiró en abril del 2017 a petición de la embajada alemana, una placa frontal de grandes dimensiones en honor a Legión Cóndor y otras siete placas también de grandes dimensiones que aparecían debajo de la primera en el cementerio de la Almudena. En la placa se podía leer en alemán:

“Hier ruhen deutsche Piloten, die im Kampf um ein freies Spanien gefallen sind” (Aquí descansan pilotos alemanes caídos en la lucha por una España libre) y en español: “Aviadores alemanas muertos por Dios y por España ¡Presentes!”.

En esta ocasión, a petición de la embajada alemana, se optó por sustituir las placas por pequeños indicativos con los nombres de los siete pilotos, pero sin mención alguna a parte de sus nombres y apellidos, fecha de nacimiento y de muerte.

El Ayuntamiento de Erandio (Bizkaia), en abril del 2021 retiró un monolito localizado en Asua en homenaje a los aviadores alemanes fallecidos tras bombardear Bizkaia en 1937, argumentando que lo había retirado «para su conservación como ‘prueba’ de la participación nazi en la Guerra Civil en Euskadi». El objetivo de esta retirada y posterior exposición contextualizada cumplía un triple objetivo:

1. Dar a conocer el motivo de por qué se puso.
2. Realizar «una lectura crítica de su colocación».
3. «Conmemorar y homenajear a las víctimas de los bombardeos sufridos por el pueblo de Erandio por parte de la Legión Cóndor, por la aviación franquista y por aviones de la Italia fascista».

Es decir: se retiró para su conservación y contextualización «fuera del espacio público y no con el objetivo de homenajear a los aviadores».

Cuanto precede no son opiniones, es historia, hechos constatados y documentados, pero para terminar, si nos lo permitís, sí queremos daros nuestra opinión

Ante estas intervenciones en Asturies, Gandesa, Madrid y Erandio (Bizkaia), que son solo unos ejemplos de la retirada de estos restos de los espacios públicos, ¿estaríamos ante un vandalismo deshumanizado institucionalmente organizado, carente de alma y de piedad?

Nos reservamos la respuesta, pero lo que está claro, es que si las administraciones competentes no intervienen de oficio y a día de hoy no cumplen con la Ley de Memoria Democrática retirando estos restos de los espacios públicos, no es de extrañar que ciudadanos y ciudadanas responsables los sustituyan, eso sí, con menos delicadeza o con la misma, con la que los operarios por ejemplo del Ayuntamiento de Ingenio (Gran Canaria) “vandalizaron” a martillazos un “vítor” franquista.

La humanidad de quien lo perdió todo

La lealtad de Francesc Falcó a la República y su compromiso y sacrificio por defenderla, lo sentimos, pero no es un cheque en blanco, no es una coraza: es un valor.

No todo lo que hicieron u opinaron quienes nos defendieron es reivindicable, y eso no niega, sino que presupone en este caso, reafirmar la necesaria puesta en valor de su entrega.

(A veces nuestras actuaciones nos pueden generar contradicciones o desasosiegos. Son nuestros, y mejor -con todos los respetos- los dejamos para nuestra intimidad y espacios privados, porque es mucho pedir que esas contradicciones nuestras, sean entendidas en lo público por los demás de la misma manera y medida, que nosotros las sentimos y entendemos.)

Gracias por vuestro tiempo.

Asociación Montañas de Libertad, Recuperando Memoria

Notas:
1.- ADAR, Asociación de Aviadores de la República
2.-“ADAR lamenta el vandalismo contra la estela de un piloto de la Legión Cóndor”
3.- ¿Qué es una estela funeraria?
“La estela (del latín stela) es un monumento monolítico con inscripciones en forma de lápida o pedestal que se erige sobre el suelo y tiene una función funeraria, conmemorativa, religiosa o geográfica.”
4.- Falcó Sanmartín, José. Barcelona, 27.IX.1916 – Toulouse (Francia), 10.V.2014. Aviador militar.
5.- La Ayuda Alemana a España 1936-39, de Ramón Hidalgo Salazar (Legión Cóndor)
6.- La guerra civil española, de Antony Beevor, experto en historia militar del siglo XX
7.- Juan Antonio de Blas, investigador, escritor, maestro y periodista (El Mazuco -La defensa imposible- volumen La guerra civil en Asturias)

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