82 años de la muerte de Azaña
82 años de la muerte de Azaña

Este jueves 3 de noviembre se cumplen 82 años de la muerte de Manuel Azaña Díaz (Alcalá de Henares, 10 de enero de 1880-Montauban, 3 de noviembre de 1940), político, escritor y periodista español, presidente del Consejo de Ministros (1931-1933) y presidente de la Segunda República (1936-1939), quien destacó por las reformas que implementó durante su gobierno, el llamado bienio social-azañista, y por su papel como jefe de la legalidad republicana durante la guerra civil española.
 
Manuel Azaña Díaz, presidente de la Segunda República entre 1936 y 1939
 
Desde el punto de vista político, milita desde 1913 hasta 1923 en el Partido Reformista de Melquíades Álvarez, pero hasta 1925 no hace explícita su vocación republicana al crear la formación Acción Republicana, que agrupa al republicanismo ilustrado y burgués. Como representante de este partido, y tras caer la dictadura de Primo de Rivera en 1930, forma parte del Comité Revolucionario que contribuye a la instauración de la República el 14 de abril de 1931, en cuyo gobierno provisional ocupa la cartera de Guerra, primero, y la Presidencia, después. Las elecciones a Cortes Constituyentes en junio de 1931 le confirmaron como Jefe del Ejecutivo, puesto del que dimitiría en septiembre de 1933.
 
En abril de 1934, ya en la oposición, consigue la unidad de los partidos republicanos dando lugar a Izquierda Republicana, organización política de la que es elegido presidente. En octubre del mismo año es detenido bajo la falsa acusación de estar implicado en los sucesos revolucionarios de Asturias y Cataluña. Tras su liberación en enero de 1935, inicia una campaña política que da lugar a la creación del Frente Popular, coalición que obtiene la victoria en las elecciones de febrero de 1936. En mayo de aquel año es elegido Presidente de la República, cargo que ocupa durante todo el desarrollo de la Guerra Civil española. Dimite de ese cargo en febrero de 1939, se exilia a Francia y fallece en Montauban en 1940.
 
Relevante escritor y periodista, colabora en los diarios El Imparcial y El Sol y dirige las revistas La Pluma y España entre 1920 y 1924. Recibe el Premio Nacional de Literatura en 1926 por su obra Vida de Juan Valera. Autor de novelas como El jardín de los frailes (1927) y la inacabada Fresdeval, también realiza incursiones en el teatro con obras como La Corona (1930).
 
Es también un relevante traductor y un gran ensayista, recogiéndose su producción en este campo en los volúmenes Plumas y palabras (1930) y La invención del Quijote y otros ensayos (1934). Su obra La velada en Benicarló, compuesta por una serie de diálogos sobre la guerra de España, puede considerarse como la más importante reflexión acerca de la década de los años treinta en nuestro país. De igual modo dejó escritas unas memorias que constituyen un destacado reflejo de la Segunda República Española. 
 
El intelectual Azaña
 
Con motivo de los 80 años de su muere, la Biblioteca Nacional de España, Acción Cultural Española (AC/E) y la Secretaría de Estado de Memoria Democrática organizaronen 2020 la exposición ‘Azaña Intelectual y estadista. A los 80 años de su fallecimiento’, en la que cerca de 200 obras retratabann al Azaña intelectual, al político y al más humano.

Un grupo de muchachas pertenecientes a las Juventudes Socialistas muestran propaganda electoral durante las elecciones generales de noviembre de 1933, primeras en las que hay sufragio universal, al incorporarse el voto femenino. Ministerio de Cultura y Deporte. Archivo General de la Administración - FONDO ALFONSO

La muestra que proporcionó una imagen completa del hombre que fue, subrayando, además de su labor como Ministro, Jefe del Gobierno y Presidente de la República, su condición de intelectual de prestigio.

Siguiendo una secuencia cronológica, la muestra recorría diferentes periodos: su infancia y juventud en Alcalá, su posterior desarrollo en Madrid, y se adentra en tres etapas cruciales de la historia de España: la Segunda República, la Guerra Civil y el Exilio.

Valle—Inclán y Manuel Azaña en la tertulia de la Cacharrería en el Ateneo de Madrid Madrid, c. 1930 Ministerio de Cultura y Deporte. Archivo General de la Administración. FONDO ALFONSO

La exposición contó con cerca de doscientas obras procedentes tanto de la BNE como de otras instituciones españolas y extranjeras, rescatando fotografías y vídeos muy poco conocidos, que nos acercan no sólo a la figura y a la obra de Azaña, sino también a la memoria de su tiempo.

Entre estas obras se encuentraba la última página (firmada por Manuel Azaña, noviembre 1925) del segundo borrador de "La vida de don Juan Valera" (Biblioteca Tomás Navarro Tomás del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC); el manuscrito original de ‘Mi rebelión en Barcelona’ (colección privada); la carta autógrafa y telegrama de Manuel Azaña, dirigidos a Diego Martínez Barrio, renunciando a su cargo de presidente de la II República. (Archivo Histórico Nacional) o la mesa en la que Manuel Azaña firmó en el exilio su dimisión como presidente de la República en 1939, que la familia que entonces le acogió en La Prasle guardó como una reliquia durante 80 años (Ministerio de Exteriores, Palacio de Santa Cruz); así como todas las primeras ediciones de sus libros y traducciones. 
 
“Izquierda Republicana en vanguardia contra el fascismo internacional”. Cartel, 1937 - Fundación Pablo Iglesias, Madrid

En 2021 la Obra de Manuel Azaña, fallecido en 1940, pasará a dominio público y la BNE pondrá a disposición del público una selección de algunos de sus escritos más importantes.

Del reformismo a la República

Manuel Azaña, nació en Alcalá de Henares (Madrid) el 10 de enero de 1880. Licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza, presentó en 1900, en la Universidad de Madrid su tesis doctoral: La responsabilidad de las multitudes. Para entonces ya había fundado en su ciudad natal la revista ‘Brisas del Henares’, y colaboraba en ‘Gente Vieja’. En ambas con el seudónimo de Salvador Rodrigo. 
 
"Viva la República”. Cartel, 1936
Fundación Pablo Iglesias, Madrid

En los años que transcurren entre 1914, cuando estalla la Primera Guerra mundial, y la proclamación de la II República en 1931, Azaña desempeñará el cargo de secretario del Ateneo de Madrid (hasta 1920) y en 1930 será elegido Presidente. 
 
Manuel Azaña y Lola de Rivas - Fotografía publicada en Estampa (17 de septiembre de 1932). Biblioteca Nacional de España

Después de haberse presentado dos veces como candidato por Puente del Arzobispo (Toledo) en las elecciones de 1918 y en las de 1923, Manuel Azaña apuesta ya claramente por la República que para él: “será democrática o no será”. En 1924, escribe su ‘Apelación a la República’, un auténtico programa de Gobierno que rechaza drásticamente la Dictadura.

En su dimensión política, Azaña interviene de manera destacada en los grandes debates de su tiempo: el Estatuto de Cataluña, la Reforma Agraria, la cuestión religiosa o el voto de la mujer.
 

Fuente → elmercuriodigital.net 

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