El segundo viaje del “Nyassa”
Eslora del
Nyassa (1944). El Nyassa fue un vapor de pasajeros portugués, de origen alemán,
con 8.980 toneladas de desplazamiento, 120 metros de eslora y 14 nudos de
velocidad máxima. (...). El Nyassa fue contratado por el gobierno de la Segunda
República española en el exilio y algunas asociaciones de apoyo a los exiliados
republicanos tras su derrota en la guerra civil española, junto con el Flandre,
el Mexique, el Ipanema y el Sinaia, para trasladar en 1942 refugiados
republicanos desde la ciudad marroquí de Casablanca hasta Veracruz, en México.
(...). Saber más... Texto: WIKIPEDIA. Imagen-Foto: WIKIPEDIA.
En
el barco que llegó a México iban las familias de Manuel Llaneza y de
Andreu Nin, así como el revolucionario de Urbiés Jesús Ibáñez
Ilustración de Alfonso Zapico.
Alfonso Zapico (Blimea, San Martín del Rey Aurelio,
Asturias, 1981) es un historietista e ilustrador español. En 2012, su novela
gráfica Dublinés fue galardonada con el Premio Nacional de Cómic. Entre otros
trabajos es de destacar su ambiciosa obra, La Balada del Norte. Saber más… WIKIPEDIA. La Nueva España
Tras
el final de la Guerra Civil muchos de los exiliados que se habían
refugiado en Francia decidieron rehacer su vida en el extranjero ante el
riesgo que suponía su regreso a la España franquista. México les abrió
las puertas y para organizar los viajes hasta allí se creó en febrero de
1939 el Servicio de Evacuación (o Emigración) de Refugiados Españoles
(SERE) bajo la dirección de Juan Negrín. El SERE pudo trasladar aquel
verano a cerca de cinco mil exiliados españoles hasta el país azteca en
los buques Sinaia, Ipanema y Mexique y colaboró en otras expediciones a
la República Dominica y a Chile, como la del Winnipeg promovida por el
poeta Pablo Neruda y que ya les he contado aquí en otra ocasión según lo
relató el anarquista Fernando Solano Palacio.

Amador Fernández
Montes. Nacimiento: 1/12/1894, La Invernal-San Martín del Rey Aurelio,
Asturias. Fallecimiento 1/11/1960, La Paz-Baja California (México). Diputado
PSOE por Oviedo (Asturias). Miembro de la Comisión Ejecutiva del PSOE en el
exilio (Francia). (...). Perteneció al Comité Revolucionario de Oviedo durante
la revolución de octubre de 1934 por lo que tuvo que exiliarse a Francia, donde
permaneció hasta las elecciones de febrero de 1936. Durante la guerra civil fue
Consejero de Comercio y Minas en el Consejo de Asturias y León y al caer
Asturias se trasladó a Barcelona donde se encargó de la Intendencia militar.
Finalizada la guerra se exilió en México. (...). Saber más... Fundación Pablo Iglesias.
Pero
las diferencias que se registraban en el seno del exilio español
tuvieron su reflejo en la creación de una segunda organización
denominada Junta de Auxilio a los Republicanos Españoles (JARE) fundada
el 31 de julio de 1939 en la órbita de Indalecio Prieto donde figuraba
como vocal el expresidente del Sindicato de los Obreros Mineros de Asturias (SOMA) Amador Fernández “Amadorín”,
una circunstancia que seguramente tuvo mucho que ver en lo que hoy les
quiero contar: el segundo viaje que realizó el Nyassa hasta México en
1942. Se trataba de un buque con historia. Había sido botado en 1906 por
una naviera alemana con el nombre de Bülow, hasta que fue requisado
diez años más tarde por el Gobierno portugués cuando los avatares de la I
Guerra Mundial lo obligaron a buscar refugio en el puerto de Lisboa;
entonces pasó a llamarse Trás-os-Montes y en 1925 lo adquirió una
empresa privada que lo rebautizó como Nyassa, denominación que ya iba a
llevar hasta su desguace en 1951.Tenía 120 metros de eslora y desplazaba
8.980 toneladas a 14 nudos de velocidad máxima, con capacidad para
albergar a 108 pasajeros de primera clase, 106 de segunda y 1828 de
tercera y también para transformarse en caso de emergencia en un buque
capaz de transportar a colectivos en peligro.

El Nyassa se desmontó en 1951 (...) el Nyassa
a Casablanca el 30 de enero, pudo recoger a 136 españoles que estuvieron en
posibilidades de pagarse el viaje por sus propios medios, más una ayuda de la
JARE de 5.000 francos por persona. Esto fue coordinado por José Alonso Mallol,
que representaba a la JARE en Casablanca. (...). Saber más... JUAN GALLEGO
CRESPO. Ediciones González Gallego (virtualcomp).
En
ese menester se estrenó al inicio de la Guerra Civil española para
devolver a la zona republicana a quienes habían cruzado la frontera
portuguesa escapando de las matanzas ordenadas en Badajoz por el
teniente coronel Juan Yagüe. Entonces zarpó de Lisboa el 10 de octubre
de 1936 y llegó a Tarragona el día 13 con 1.435 personas, entre ellas
160 mujeres y 50 niños. Con estos antecedentes fue contratado por la
JARE para el traslado de los últimos refugiados españoles hasta México
en 1942, cuando la mayor parte de quienes habían tenido más
responsabilidades o fama durante el periodo republicano ya se
encontraban allí. Aquel año el Nyassa arribó en tres ocasiones en el
país que había ofrecido su hospitalidad a los republicanos caídos en
desgracia. El primer viaje fue fletado en enero de 1942 por un comité
israelita para llevar judíos desde Marsella, aunque no llegó a su
destino hasta el 3 de marzo. 136 españoles pudieron aprovechar su escala
en Casablanca, para ocupar esas plazas libres, pero tuvieron que
completar con sus propios ahorros lo donado por la ayuda de la Junta de
Auxilio, que dio 5.000 francos para abonar el coste de cada pasaje. El
segundo salió de Casablanca el 30 de abril y arribó a Veracruz el 22 de
mayo de 1942, el mismo día en el que México rompió su neutralidad para
declarar la guerra a las potencias del Eje, después de que los
submarinos alemanes le hubiesen hundido varios barcos. La mayor parte
del pasaje fueron familias catalanas y vascas, con representación de
todo el abanico político nacionalista de ambos territorios.
Francisco
Barnés Salinas, fotografiado en 1932. Francisco José Barnés Salinas (Algeciras,
1877-México D.F., 1947) fue un catedrático y político español, diputado a
Cortes y ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes durante la Segunda
República. (...). Saber más... WIKIPEDIA.
Entre los viajeros hubo cargos políticos que iban desde el exministro de Instrucción Pública y Bellas Artes de la República Francisco Barnés Salinas
al exconsejero de Agricultura en el Gobierno de Euzkadi Gonzalo Nárdiz
Bengoechea; el de Trabajo, Previsión y Comunicaciones Juan de los Toyos
González, o el expresidente de la Diputación de Vizcaya don Rufino
Laiseca Oronoz. Con ellos se encontraban numerosos alcaldes y cargos
municipales y algún personaje en cuya biografía encontramos un enlace
con Asturias, como Vicente Lascurain Fernández, que había sido comisario
en el XIV Cuerpo de ejército combatiendo en el Frente Norte. En la
lista de embarque también vemos a algunos vecinos muy conocidos de la
Montaña Central, así el corresponsal de “Avance” en Langreo José María
de la Torre Orviz; el revolucionario de Urbiés Jesús Ibáñez, que
ustedes recordarán por otras historias publicadas en esta página, y la
familia de Manuel Llaneza: su viuda Ventura Jove, dos de sus cinco
hijos, Alba, y Antonio, la mujer de este Teresa Fernández Velasco y el
hijo de ambos Manuel Llaneza Fernández. Ibáñez y los Llaneza eran viejos
conocidos de Mieres.
Jesús Ibáñez (1889-1948).
Además,
Antonio y él habían coincidido en Barcelona tras la caída de Asturias y
según las memorias de Santiago Blanco “el Avilesu”, también mierense,
los tres fueron perseguidos en Cataluña por el estalinismo: “Tuve
el honor de verme acompañado en la espantosa calificación de trotskista
nada menos que de Antonio Llaneza, un hijo digno, valiente y legendario
de Manuel Llaneza, el apóstol astur de los mineros asturianos; y Jesús
Ibáñez, un periodista, borracho y genial, que había tenido la audacia de
ir a vivir a Rusia allá por los años treinta y había regresado del
paraíso soviético más anticomunista que un obispo burgalés. Ibáñez era
demoledor, sarcástico, grosero, y jamás decía “comunista” sin anteponer
un adjetivo infamante e intestinal”. La casualidad también quiso que Ibáñez también se encontrase en el Nyassa con
la viuda de Andreu Nin, Olga Tareeva y sus dos hijas Ira y Nora. Nin
había sido su compañero durante aquellos años en Rusia y él los había
ayudado a retornar a España en 1930. Finalmente, Nin sí cayó en
manos de los agentes de Stalin y, tras haber sido torturado, asesinado e
injuriado tras su muerte, la desaparición de su cadáver convirtió este
episodio en una de las páginas más negras del comunismo pro-soviético.
(...) Andreu
Nin Pérez, se casó con una ciudadana rusa Olga Tareeva, antigua bailarina de la
Ópera de Moscú, de cuyo matrimonio nacieron dos hijas. Curiosamente, como los
matrimonios soviéticos no tenían ninguna validez en España, tuvieron que volver
a casarse, ocho años después, en Riga, la capital de Letonia. En el consulado español en Riga fue donde
les dieron un pasaporte familiar para poder viajar a España. (...). Sabermás... AMANTES DE LA HISTORIA.
Carmen
Romero, una de las pasajeras de aquella expedición, escribió en sus
recuerdos que las autoridades sanitarias no autorizaron la subida al
barco de unos pobres muchachos con un inoportuno sarampión, pero sin
embargo, sí lograron filtrarse como polizones nueve refugiados, vestidos
de moros cargando equipajes, y con ellos otros evadidos de la
construcción del ferrocarril transahariano, donde llegaron a trabajar
dos mil españoles internos en los campos de extranjeros. La travesía fue
tranquila y reinó la concordia, entre conciertos improvisados del
orfeón de los catalanes y el coro de los vascos y hubo anécdotas
curiosas. Una la protagonizó el famoso científico zaragozano Odón de
Buen, que ya contaba entonces 79 años de edad, quien un día reunió a un
grupo de pasajeros en cubierta para que fuesen testigos de cómo arrojaba
por la borda la Legión de Honor que le había dado el Gobierno francés,
en protesta por la mala acogida que había tenido este país con los
refugiados.Ya en Veracruz, una comisión presidida por don Indalecio
Prieto, recibió al Nyassa y cada viajero buscó los apoyos necesarios
para rehacer su vida. Olga Tareeva y sus hijas fueron protegidas por el
entorno del trotskismo, que aún tenía reciente el asesinato del líder
revolucionario.
Rafael Fernández
Álvarez con su esposa Pura Tomás y sus tres hijos, Rafael, Carlos y Jorge, en
1951. ARCHIVO PERSONAL DE LA FAMILIA, CEDIDO POR RAFAEL FERNÁNDEZ TOMÁS 18/12/2010. Fuente: El comercio.
Por
su parte Ibáñez se ganó la vida con empleos precarios como el de
vigilante en una destilería de tequila y a la vez dirigió la edición de
“Avance” en el exilio; mientras tanto Antonio Llaneza trabajó en una
fábrica de tabacos y vendió productos alimenticios antes de colocarse
como administrativo. Ambos colaboraron en revistas y publicaciones de
todo tipo y se posicionaron junto a otros destacados mierenses como Juan
Pablo García y Ramón González Peña contra el oficialismo del PSOE
representado por Amador Fernández y Belarmino Tomás, su hija Purificación y su yerno Rafael Fernández.
Los dos escribieron sus memorias, que curiosamente también se aproximan
en los títulos. El libro de Jesús Ibáñez se llama “Discos de acero.
Memorias de mi cadáver” y el de Antonio Llaneza “Codos de acero y
pezuñas de ciervo”. Ibáñez falleció en 1948 en una humilde pensión del
D. F. y Antonio en 1988, pero siempre tuvo una vida sencilla y en sus
últimos años estuvo al margen del grupo que volvió a Asturias para vivir
la restauración del socialismo. El Nyassa volvió a Veracruz en septiembre de 1942.
Un mes más tarde la JARE envió a México con 104 viajeros al Serpa Pinto
II, un barco mucho más pequeño, que ya había ido el 16 de diciembre de
1941 con sólo 36 personas. Ya no hubo más viajes.

El último barco
del exilio español: de Casablanca a la libertad. Era el 22 de septiembre de
1942. El vapor portugués "Nyassa", con 850 refugiados a bordo, sobre
todo republicanos españoles, pero también judíos, ponía rumbo a México y de ahí
a Nueva York, siguiendo la ruta a través del Caribe que llevó a miles de
personas a la libertad. (...). Saber más... la Voz de La República.
FUENTE: ERNESTO BURGOS-HISTORIADOR. Publicado por La nueva España el 06·07·21. Ver enlace.
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