
La creación del POUM está enormemente ligada con la debacle que
supuso para el movimiento obrero la huelga con carácter insurreccional
de octubre de 1934. En ese momento quedó evidente que el movimiento
obrero no seguía una dirección clara, el cual estaba dividido entre
anarquismo y socialismo. Para conseguir aunar la fuerza obrera hacia una
misma dirección y reactivar la militancia se decidió crear el POUM.
La creación del POUM
El POUM nació el 29 de septiembre de 1935, de la fusión de dos
partidos, el Bloque Obrero y Campesino y la Izquierda Comunista de
España. Parece que una de las razones por las que el BOC decidiera
entrar en esta fusión fue por la necesidad que tenía este partido
regionalista de dar un salto más allá de su influencia en Cataluña, y
poder así recalar en la política de corte estatal. La Izquierda
Comunista de España tenía la capacidad de aportar núcleos por toda
España por los que el BOC lanzara su influencia. Tampoco debemos olvidar
la experiencia que le otorgaba al nuevo partido la militancia de la
ICE, la cual estaba repleta de activistas y con un gran badaje
intelectual. Esta fusión también era positiva para la ICE, ya que
conseguía recoger la base política del BOC en Cataluña y además
renovaban y robustecían la dirección del partido. A pesar de existir
algunas diferencias ideológicas entre los partidos fusionados, parece
que los líderes de ambos partidos decidieron no ponerlas sobre la mesa,
priorizando la unión, la cual consideraban de urgencia. Después de la
unión, los militantes de BOC e ICE estaban entusiasmados, se mostraban
confiados de haber acertado con la dirección que habían tomado y que la
formación de este nuevo partido iba a conseguir un efecto inmediato en
la izquierda. El propio Joaquim Maurín mostró su entusiasmo en el diario
La Batalla: “Un paso práctico en un proceso general de unificación”.
Pronto se realizó una labor de propaganda y esparcimiento de ideas a
través de los boletines y diarios afines al POUM. Eran diarios cuyo
principal objetivo era propagandístico, y su finalidad era conseguir que
el lector se adhiriera a la causa, tal y como nos apunta Cindy Coignard
en su más que completo artículo sobre las imágenes en estos periódicos.
Uno de los principales diarios fue La Batalla (Barcelona), pero también encontramos otros como Front (Terrassa, Sitges), L´Espurna (Girona) Avant (Figueres) o Impuls
(Sabadell). En estos diarios afines a la causa del nuevo partido se
pudieron ver una gran cantidad de artículos de personajes muy
importantes dentro del POUM, como Andreu Nin o Juan Andrade.
El POUM y el Frente Popular
La creación del frente popular vino incentivada por la catástrofe que
supuso para el movimiento obrero la revolución de octubre de 1934. Ante
la llegada inminente de elecciones a Cortes, los partidos de izquierda
mostraron en su mayoría esa intención de unidad. A pesar de las
discrepancias de algunos partidos como el POUM por el hecho de que
estuviesen mezclados partidos pequeñoburgueses con el movimiento obrero,
la necesidad de esa alianza prevaleció. Eso sí, las negociaciones
fueron duras y el acuerdo tardó en llegar. El POUM no salió satisfecho
de este pacto ya que creía que habían sido totalmente ignorados, pero
creyeron que en el futuro sí que podrían tener más fuerza dentro de ese
Frente Popular —cosa que no ocurrió—.
Las mujeres en el POUM
Las reivindicaciones de las mujeres dentro del POUM fueron
difícilmente encajables dentro del discurso marxista del POUM. La
problemática de la mujer no tenía nada que ver con la lucha de clases en
la que se focalizaba el POUM, y por lo tanto esta cuestión planteaba
una enorme complejidad dentro de esa óptica. Igualmente, esto no quita
que sí que existieran diferencias entre las mujeres según su clase
social. El feminismo burgués, por ejemplo, no perseguía las mismas
reivindicaciones que las mujeres obreras. Sin embargo, estas
reivindicaciones de las mujeres del POUM no estaban tan dirigidas a la
conciencia de clase sino a la opresión que tenían por elementos como el
patriarcado.
Algunos testimonios como el de María Teresa Carbonell podrían
indicarnos que la mujer en el POUM fuese “una militante más”, sin
embargo, la creación del propio Secretariado Femenino o el órgano de
prensa femenino Emancipación, nos indica que también había cierta
diferenciación.
El prototipo de mujer en el POUM es complicado de conseguir pues es
homogeneizar a muchos individuos con sus propias inquietudes. Pero si es
cierto que parece que existen parecidos en los orígenes de estas
mujeres. Todas tuvieron un ejemplo a seguir dentro de su propia familia
dentro del activismo político y las tesis que defienden parece también
bastante homogéneas dentro de los artículos.
Las mujeres del POUM también acudieron al frente cuando estalló la
guerra. No fue un movimiento coordinado y controlado, sino por una
conducta individual. Chocó esta imagen con la tradicional del hombre al
frente y la mujer en la retaguardia. Pero existieron casos de milicianas
como el de Margarita Zimbal o el de Mika Etchebéhère. Sin embargo,
conforme fue avanzando la guerra fueron quedando postergadas a
retaguardia y fue raro ver a mujeres en el frente.
El POUM en la Guerra
La participación del POUM en la Guerra Civil se correspondió con la
creación y control de milicias. Una de las más importantes fue la
Columna Internacional Lenin, cuyo objetivo era defender el frente de
Aragón. Igualmente, también estuvieron miembros del POUM defendiendo
territorios más alejados de su zona de influencia tradicional, como
Extremadura, Asturias, Valencia o Madrid. El POUM participó activamente
en el Comité de Milicias y en otros organismos. Sin embargo, dentro del
POUM pronto empezó a quedar la Guerra Civil relegada a un segundo plano
en detrimento de la revolución, la cual el partido pretendía acelerar en
la medida de lo posible.
Los sucesos de mayo de 1937
Esta deriva hacia la revolución del POUM hizo que se crease una
guerra dentro de la propia guerra. Es una de las posibles definiciones
que le podemos dar a lo sucedido en mayo de 1937. Se produjo una ruptura
entre ese frágil equilibrio que existía entre las fuerzas del orden y
las fuerzas revolucionarias. Se podría decir que existió una batalla
entre el centralismo y el orden contra la revolución y ese caos que
siempre conlleva. Por ello se realizaron durante el mes de mayo
enfrentamientos tanto en Barcelona como en otras áreas de Cataluña entre
los militantes trotskistas y estalinistas, Esa lucha entre trotskismo y
estalinismo pasó de la política a las barricadas.
Tras el definitivo control de la ciudad de Barcelona el 7 de mayo de
1937 por la Guardia de Asalto, el POUM se encontró en una situación
crítica, pues estos hechos de mayo supondrían su posterior
ilegalización, persecución y eliminación.
Con el gobierno de Negrín cambió totalmente la situación para la
extrema izquierda revolucionaria. Esa situación de coexistencia pacífica
que había existido con el gobierno de Largo Caballero pasó hacia una
total represión con el de Negrín. El cual dejó actuar al Comisariado del
Pueblo Para Asuntos Internos (NKVD) soviético y realizar esta
persecución. Los objetivos del nuevo gobierno republicano hicieron que
chocaran con la gran revolución que estaba intentando implantar el POUM.
La represión se llevó con dureza contra Andreu Nin, el por entonces
líder del POUM, el cual algunas fuentes consideran que fue asesinado por
los agentes soviéticos. Otros militantes del POUM fueron detenidos por
la policía. Y la militancia del POUM en general fue acusada de ser y
actuar como una organización fascista incluso al servicio de los
intereses de Franco, Hitler y Mussolini.
El POUM en la memoria y la historia
Tuvo un gran impacto sus actuaciones en todas las izquierdas y sigue
siendo un tema controvertido hasta la actualidad. Sigue envuelto en
polémica y podemos ver que sigue apareciendo en la sociedad a través de
libros y películas, como el Homenaje a Cataluña de Orwell o Tierra y
Libertad, de Ken Loach. Además, parece que sigue siendo una visión
utilizada por cierto sector de izquierda como método alternativo al
capitalismo, lejos de la visión preponderante del totalitarismo
soviético.
Para profundizar más en la historia del POUM es recomendable la lectura de la obra monográfica de Andy Durgan, Comunismo, revolución y movimiento obrero en Cataluña, 1920-1936. Los orígenes del POUM,
Barcelona, Laertes, 2016. Igualmente aconsejable la investigación de
Cindy Coignard con respecto al papel de las mujeres en el POUM: Las militantes del POUM, Barcelona, Laertes, 2017.
Otras fuentes de interés:
-Alba, Víctor., El marxismo en España (1919-1939). Historia del BOC y del POUM, México, 1973, (reed. por la fundación Andreu Nin, 2002).
-Bonamusa, Francesc., Andreu Nin y el movimiento comunista en España (1930-1937), Barcelona, Anagrama, 1974.
-Casanova, Julián., República y Guerra Civil, Barcelona, Critica/Marcial Pons, 2007.
-Casanova, Julián., Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938, Madrid, Siglo XXI, 1985.
-Casterás, Ramón., “Las Juventudes Comunistas Ibéricas del POUM” en Studia Histórica, Historia contemporánea, nº 5, 1987.
-Coignard, Cindy., “Las imágenes también hablan: la prensa del POUM en la Guerra Civil” en PILAR, Université Paris 8-Vincennes-Saint-Denis, 2010. pp. 45-64.
-Durgan, Andy., “Trotsky, el POUM y los hechos de mayo” en Viento Sur, número 93, septiembre de 2007. pp. 57-69.
-García Banús, M. Teresa., “Una vida bien vivida” Viento Sur, nº 93, septiembre de 2007. pp. 9-15.
-Montagut, Eduardo., “La creación del Frente Popular” en NuevaTribuna.es, consultado el 26/06/2020. https://www.nuevatribuna.es/articulo/historia/creacion-frente-popular/20151228163112123893.html
-Pagès, Pelai y Gutiérrez-Álvarez, P., El POUM y el caso Nin. Una historia abierta, Barcelona, Laertes, 2014.
-Payne, Stanley., La Guerra Civil española, Madrid, Alianza, 2014.
-Solano, Wilebaldo., El POUM en la Historia. Andreu Nin y la revolución española. París, Ruedo Ibérico, 1974.
También es recomendable la página web de la Fundación Andreu Nin: https://fundanin.net/
No hay comentarios
Publicar un comentario