¿Tiene derecho Juan Carlos I a la inviolabilidad?
Manel Mas
La Constitución, en su artículo 56.3, dice: La persona del Rey es inviolable y no estará sujeta a responsabilidad. Sus actos deberán estar siempre refrendados en la forma establecida en el artículo 64, sin la cual no tendrán validez, salvo lo que dispone el artículo 65.2. (privado Casa Real).
El diccionario hace estas dos referencias:
Inviolabilidad parlamentaria: Especial irresponsabilidad jurídica de actos y opiniones realizados en el ejercicio de su cargo.
Inviolabilidad personal: Protección penal de que disfrutan las personas que ocupan cargos públicos.
Todos los que, como yo, no somos abogados, nos cuesta de entender este tipo de vocabulario, el diccionario hace siempre referencia a la inviolabilidad de las personas solo en el ejercicio de su cargo, pero esto no lo dice la carta magna, entonces… el jefe del estado será siempre inviolable haga lo que haga?
En caso afirmativo considero que se trata de una barbaridad y planteo estas preguntas: ¿podrá robar, extorsionar, chantajear, secuestrar, violar o incluso asesinar, pudiendo estar protegido, sin tener que dar explicaciones ni tampoco ser juzgado por sus delitos? Si lo que hace a título personal o aprovechándose del cargo le está permitido, alguien lo tendrá que explicar por qué no lo entiendo.
Hasta hace bien poco la monarquía española disfrutaba de un pacto de silencio por parte de los medios españoles que no la criticaban a pesar de saber muchos detalles. El Borbón ha seguido fielmente la forma de vida de sus antepasados, buena vida, amigas, lujos, hijos no reconocidos, excepto uno, etc., etc. El New York Times lo calificó de Playboy, además de hacer pública su fortuna personal.
Ignoro si los que estáis leyendo estas líneas sois conocedores o no de los comentarios de medios del extranjero que han aparecido recientemente en poco tiempo, nada que ver con lo que dicen o, mejor dicho, lo que no dicen, ignoran o esconden los medios españoles. El artículo de Le Monde de París y Tribune de Ginebra son bastante explícitos en detalles y opiniones relativos al emérito Juan Carlos.
El peor de todos ellos ha sido el de RTV francesa que, entre otros comentarios, califica al emérito como un vulgar gánster de la serie B, paseándose por Ginebra con un maletín conteniendo cerca dos millones de euros. Añade un comentario relativo a que los Borbones no hacen caso de la historia, puesto que perdieron la corona dos veces en los siglos XIX y XX y que, una vez más, no se trataría de una excepción sino la regla.
Llegado a este punto me pregunto: Si Juan Carlos perdió la inviolabilidad en 2014 al abdicar a favor de su hijo, ¿porque los letrados del congreso consideran que su inviolabilidad tiene “efectos jurídicos permanentes”?, lo cual impide abrir una investigación, puesto que los que están a favor no disponen, de una mayoría suficiente a causa de la negativa de PSOE, VOX y Cs.
Al ver como se defiende la monarquía a nivel institucional, me viene a la memoria una conocida frase de la periodista Natza Farré cuando decía: Si se protegieran tan bien los derechos de la ciudadanía como los de la corona, estaríamos hablando de otro país, no de España.
La fiscalía española creo que está investigando al emérito porque se ha visto obligada ante el escándalo y conocimiento de los movimientos bancarios que Suiza está investigando. Si añadimos las denuncias y quejas de Corina Larssen y sus declaraciones a Villarejo, entenderemos que, ni que sea por el posible desprestigio de la justicia española, se haya abierto una investigación que no sabemos hasta donde llegará.
Hoy me ha llegado la última noticia que desconocía: El rey emérito cobró a través de Zagatka (un fondo de inversión) una comisión de OHL de 4,2 millones de euros, como intermediario en la venta de unos terrenos en la playa de Carmen (México) en favor de OHL.
A causa de la longitud de este artículo, dejo para una segunda parte el resto de motivos a exponer sobre este particular tema que, de una forma u otra afecta a todos los ciudadanos.
Manel Mas
La Constitución, en su artículo 56.3, dice: La persona del Rey es inviolable y no estará sujeta a responsabilidad. Sus actos deberán estar siempre refrendados en la forma establecida en el artículo 64, sin la cual no tendrán validez, salvo lo que dispone el artículo 65.2. (privado Casa Real).
El diccionario hace estas dos referencias:
Inviolabilidad parlamentaria: Especial irresponsabilidad jurídica de actos y opiniones realizados en el ejercicio de su cargo.
Inviolabilidad personal: Protección penal de que disfrutan las personas que ocupan cargos públicos.
Todos los que, como yo, no somos abogados, nos cuesta de entender este tipo de vocabulario, el diccionario hace siempre referencia a la inviolabilidad de las personas solo en el ejercicio de su cargo, pero esto no lo dice la carta magna, entonces… el jefe del estado será siempre inviolable haga lo que haga?
En caso afirmativo considero que se trata de una barbaridad y planteo estas preguntas: ¿podrá robar, extorsionar, chantajear, secuestrar, violar o incluso asesinar, pudiendo estar protegido, sin tener que dar explicaciones ni tampoco ser juzgado por sus delitos? Si lo que hace a título personal o aprovechándose del cargo le está permitido, alguien lo tendrá que explicar por qué no lo entiendo.
Hasta hace bien poco la monarquía española disfrutaba de un pacto de silencio por parte de los medios españoles que no la criticaban a pesar de saber muchos detalles. El Borbón ha seguido fielmente la forma de vida de sus antepasados, buena vida, amigas, lujos, hijos no reconocidos, excepto uno, etc., etc. El New York Times lo calificó de Playboy, además de hacer pública su fortuna personal.
Ignoro si los que estáis leyendo estas líneas sois conocedores o no de los comentarios de medios del extranjero que han aparecido recientemente en poco tiempo, nada que ver con lo que dicen o, mejor dicho, lo que no dicen, ignoran o esconden los medios españoles. El artículo de Le Monde de París y Tribune de Ginebra son bastante explícitos en detalles y opiniones relativos al emérito Juan Carlos.
El peor de todos ellos ha sido el de RTV francesa que, entre otros comentarios, califica al emérito como un vulgar gánster de la serie B, paseándose por Ginebra con un maletín conteniendo cerca dos millones de euros. Añade un comentario relativo a que los Borbones no hacen caso de la historia, puesto que perdieron la corona dos veces en los siglos XIX y XX y que, una vez más, no se trataría de una excepción sino la regla.
Llegado a este punto me pregunto: Si Juan Carlos perdió la inviolabilidad en 2014 al abdicar a favor de su hijo, ¿porque los letrados del congreso consideran que su inviolabilidad tiene “efectos jurídicos permanentes”?, lo cual impide abrir una investigación, puesto que los que están a favor no disponen, de una mayoría suficiente a causa de la negativa de PSOE, VOX y Cs.
Al ver como se defiende la monarquía a nivel institucional, me viene a la memoria una conocida frase de la periodista Natza Farré cuando decía: Si se protegieran tan bien los derechos de la ciudadanía como los de la corona, estaríamos hablando de otro país, no de España.
La fiscalía española creo que está investigando al emérito porque se ha visto obligada ante el escándalo y conocimiento de los movimientos bancarios que Suiza está investigando. Si añadimos las denuncias y quejas de Corina Larssen y sus declaraciones a Villarejo, entenderemos que, ni que sea por el posible desprestigio de la justicia española, se haya abierto una investigación que no sabemos hasta donde llegará.
Hoy me ha llegado la última noticia que desconocía: El rey emérito cobró a través de Zagatka (un fondo de inversión) una comisión de OHL de 4,2 millones de euros, como intermediario en la venta de unos terrenos en la playa de Carmen (México) en favor de OHL.
A causa de la longitud de este artículo, dejo para una segunda parte el resto de motivos a exponer sobre este particular tema que, de una forma u otra afecta a todos los ciudadanos.
Fuente → diario16.com
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