Revuelta de Mujeres en la Iglesia católica


Revuelta de Mujeres en la Iglesia católica
@ellibelaresc
 
 En una gacetilla anterior (La iglesia católica en mano de los ultras) nos hacíamos eco del retroceso ideológico del papa Francisco en temas referentes al sacerdocio de las mujeres y a su papel ninguneado en el seno de la iglesia cató0lica, y comentábamos que ese retroceso no venía del propio papa, sino que estaba impuesto por el ala dura del cardenalato encabezada por el cardenal africano Robert Sarah y unos cuantos integristas más que amenazaban con un cisma si Francisco no volvía a la ortodoxia católica. El papa retrocedió en sus convicciones, y el tema se zanjó hasta el pasado 1 de marzo, en donde hemos podido apreciar a grupos de religiosas manifestándose en las plazas de las catedrales (Santiago de Compostela, Barcelona, Sevilla y Madrid) y plantando cara al papel que los mandamases del Vaticano les tienen reservado y reclaman su derecho al sacerdocio, al diaconado y al presbiteriano femenino y que los textos doctrinales incorporen un lenguaje inclusivo. Los movimientos de liberación de la mujer son un nuevo signo de los tiempos y la Iglesia no puede ser ajena a esta revolución necesaria. Por eso es preciso acabar con una situación discriminatoria y del todo punto irracional, como es el machismo en la Iglesia católica, un fenómeno que se ha perpetuado en el poder durante siglos y que va no solo contra los derechos humanos sino contra los principios mismos del cristianismo. Estamos sin duda ante el 15M de las mujeres de la Iglesia. Una “revuelta” como Dios manda.

La protesta convocada por Revuelta de Mujeres en la iglesia nos permite pensar que estamos, por fin, ante una auténtica revolución feminista en el seno de la Iglesia de Roma. Que las mujeres se manifiesten delante de las catedrales para reclamar justicia, igualdad de trato y las mismas oportunidades que los varones es algo inédito en la historia, sobre todo en un país como el nuestro, donde la Iglesia católica ha sido tradicional y esencialmente machista. “No nos hemos reunido con los obispos, pero les diríamos que no puede ser que en los lugares de toma de decisiones las mujeres sigamos siendo tan invisibles. Es verdad que el papa Francisco ha hecho algunos nombramientos significativos, pero no dejamos de ser una anécdota en la Iglesia”, ha explicado la religiosa y portavoz del movimiento, Pepa Torres. Las convocantes, además, aseguran que les “encantaría” que los sacerdotes y prelados se unieran a la manifestación feminista. “Nos encantaría que hoy, 1 de marzo, alguno bajara a estar con nosotras, que cantara y orara con nosotras y entonces diríamos: ¡Milagro! Les invitamos. No somos enemigas”. Los detonantes para movilizarse, según han declarado las organizadoras, son el Sínodo de la Amazonía, donde las mujeres no tuvieron voto, y el informe sobre la violencia y explotación laboral a religiosas, ya tratados en la gacetilla de referencia.

Que los obispos y demás gerifaltes digan lo que quieran (que siempre es lo que les conviene), pero tendrán que reconocer que la mujer es una pieza fundamental dentro de la estructura católica, tanto como lo puede ser en cualquier otro ámbito de la sociedad civil. No solo ha desempeñado un papel decisivo en hospitales y colegios, en congregaciones religiosas, en instituciones de asistencia benéfica y social y en misiones en el Tercer Mundo, sino que ha estado codo con codo con sus compañeros religiosos en los momentos y lugares más trascendentales para la historia de la humanidad. La puerta del poder católico sigue estando cerrada para las mujeres (por arriba en las altas esferas de Roma y también por abajo, en las iglesias y parroquias, donde ni siquiera se les concede el derecho a dar una misa como sacerdotisas). Por eso se han concentrado para pedir “una reforma profunda” que acabe con la “discriminación” y para reclamar “voz y voto” en las estructuras eclesiales, de tal forma que “no haya nunca más una Conferencia Episcopal Española (CEE) sin mujeres”. 


La Revuelta de Mujeres en la Iglesia se suma a las movilizaciones mundiales convocadas por Voices of Faith, una iniciativa que crea eventos y grupos de redes internacionales “para empoderar a las mujeres católicas en la toma de decisiones a nivel local y global de la Iglesia Católica”. Interesante el vídeo que plantea las reivindicaciones: