M. Relti: «Indisimulado `giro copernicano´ de Unidas Podemos hacia un `republicanismo felipista´» La organización política socialdemócrata Podemos confirmó este miércoles, a través de su portavoz Pablo Echenique, el claro reposicionamiento de su partido en relación con la Monarquía y el propio Felipe VI.
En efecto, Echenique celebró con alborozo que el monarca "rectificara" el tono de su discurso navideño, demostrando "un mejor olfato político" en relación con los años anteriores y con la nueva etapa que se abre en España.
"Frente a un Felipe VI que en el 2007 decidía atar su destino a las derechas, - declaró este miércoles el portavoz de Podemos en su comparecencia ante los medios - creo que ayer vimos a un Jefe de Estado que rectificada parcialmente, que moderaba su discurso y que de algún modo demostraba tener un mejor olfato político que el que tuvo entonces".
Echenique se refería, naturalmente, al tradicional discurso televisivo pronunciado en la noche del 24 de diciemre por Felipe Borbón -una práctica inaugurada por Franco para dirigirse a los españoles-, en la que el monarca reclamó "confianza y unidad ante el futuro, sin caer en los extremos".
La laudatoria consideración que al portavoz de Podemos le mereció la intervención real, no hizo más que ratificar el cambio que se ha operado en la dirección de Unidas Podemos en su trato con la Monarquía borbónica. El propio Secretario General de Podemos, Pablo Iglesias, días atrás, se cuidó en calificar el discurso en catalán pronunciado por la infanta Leonor, como "todo un detallazo" de la Monarquía. En esa misma línea de euforia monárquica, el dirigente de Podemos llegó a decir que la niña había hablado en "perfecto catalán" en un acto de entrega de premios que presidió. Y como es sabido - o debiera de serlo - en política no se produce ningún gesto sin que exista detrás de él una contrapartida previamente concertada o, cuando menos, boceteada.
La III República ha dejado ya de ser ya - si alguna vez lo fue - una prioridad para los neosocialdemócratas de Podemos. El "giro copernicano" de los morados en relación con la Monarquía, en antítesis con lo que furibundamente alegaban hace tan sólo cuatro años con el objetivo de hacerse con las rentas políticas que generaba el general repudio social en contra del rey y de sus escándalos, parece evidente.
La histérica huida podemita hacía el manto protector que proporciona el Sistema, no hace sino confirmar el compromiso de esta organización con la operación política de la llamada "Segunda Transición" hoy en marcha, orientada simplemente a reajustar aspectos formales de ruinoso y corrupto aparato del Estado heredado del franquismo, tratando de "ponerlo al dia", pero sin que lleguen a operarse en él cambios sustanciales.
El principio lampedusiano, pues, consistente en "cambiar algunas cosillas para que nada cambie esencialmente" continúa siendo hoy más que nunca, la consigna en vigor de los poderes que integran el establishment. Y los de Unidas Podemos no están haciendo otra cosa que acoger esa posibilidad con alborozo.
Fuente → canarias-semanal.org
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