«Fue un ejemplo de ética política»


«Fue un ejemplo de ética política»: Más de un centenar de personas se reunieron ayer en el cementerio de La Espina, en el concejo de Salas, para rendir homenaje al último presidente de la II República Española en el exilio (1970-1977), José Maldonado, al cumplirse los 32 años de su fallecimiento. El acto estaba organizado por el Ateneo Republicano, en colaboración con los ayuntamientos de Tineo y Salas, y no ha estado exento de polémica después de que el Arzobispado rechazase la colocación de una placa en su memoria en el muro del cementerio.

El presidente del Ateneo, Alejandro Villa Allande, explicó ayer que en las cartas que envió tanto a la archidiócesis de Oviedo como al Principado, «no pedía permiso, no se me ocurre pedirlo para un acto de justicia histórica. Simplemente anunciaba nuestra voluntad, en colaboración con los ayuntamientos, de colocar la placa. Se nos dijo que no, y yo creo que a la fuerza no vamos a colocarla, porque tememos que pueda ser objeto de actos vandálicos».

No obstante, indicó, «conservaremos la placa y esperamos poder colocarla más adelante», añadiendo que hay rótulos en otros cementerios, como en el de Noreña en recuerdo del economista y político Álvaro Flórez Estrada. «No entiendo muy bien las razones, a no ser que tengamos que sospechar que se trata de un homenaje a un republicano y que todavía eso levanta ampollas en ciertos círculos». Dejando a un lado «la placa de la discordia», como el propio Villa la denominó, el acto se convirtió en un concurrido y emotivo homenaje a la figura de Maldonado. «Teníamos pensado un acto sencillo, pero estamos sorprendidos por tanta gente». Tras depositar un ramo de flores sobre la tumba del político, junto a la que se depositó la placa, el presidente del Ateneo tomó la palabra para glosar la figura de Maldonado, «último presidente del gobierno de la República, naturalmente en el exilio, y un ejemplo de vida íntegra».

Villa también recordó que con diecinueve años acabó la carrera de Derecho y ya desde muy joven se involucró en la vida política y social de la región, siendo concejal y el primer alcalde democrático de Tineo. En representación de la familia estuvo Conchita Francos Maldonado, sobrina-nieta del político, quien destacó que era «una persona entrañable, llena de humanidad, honesta y todo un ejemplo de ética política». En el acto también estuvieron el alcalde de Salas, Sergio Hidalgo, y las ediles tinetenses Maite Ruiz y Verónica Gómez, además de rostros conocidos de la izquierda asturiana, como los políticos Antonio Masip y Jesús Montes Estrada 'Churruca'...