OBISPOS, DRAG QUEENS Y FRANQUISMO

OBISPOS, DRAG QUEENS Y FRANQUISMO: Por FRANCISCO GONZÁLEZ TEJERA / CANARIAS-SEMANAL.ORG.- Los obispos canarios dicen que lloran de pena por ver a una drag haciendo su espectáculo en el carnaval de Las Palmas, que sienten pena, que les aflige “tanto pecado” y que se encomiendan a su inmenso abanico de vírgenes, Cristos y otras figuras de su oscuro universo de la superstición ritual entre hostias, relicarios y exorcismos.

   En su fanatismo extremo a los prelados no le afectan los millones de casos de pederastia de los curas en su Iglesia, su permanente “carnaval” de escándalos sexuales, abusos, maltrato, persecución, apoyo descarado al fascismo desde los tiempos del nazismo, el franquismo y las dictaduras de Pinochet en Chile o Videla en Argentina, entre otras, donde participaron activamente o guardaron un silencio cómplice.

  Estos prebostes de sotana satánica en Canarias siguen sin condenar el sanguinario genocidio franquista, que con la estrecha colaboración de la Iglesia Católica asesinó, sin que hubiera guerra, a miles de activistas de la izquierda, fusilados o arrojados a pozos, simas, chimeneas volcánicas y a las profundidades marinas.

   Todavía no han pedido perdón por su participación directa en este holocausto isleño, pero se echan las manos a la cabeza porque en un carnaval históricamente pagano, alguien escenifique con humor en un concurso algo relacionado con sus creencias medievales.

   Miles de familias de las víctimas del franquismo en estas islas seguimos esperando un perdón de la Iglesia Católica, que sabemos que jamás llegará porque las ideologías totalitarias son innatas a esta enorme secta, están incrustadas en sus raíces ancestrales desde los tiempos de la llamada “Santa Inquisición”, donde ya hicieron sus “prácticas” de salvajes torturas y todo tipo de crímenes.

   Los señores obispos Francisco Cases y Bernardo Álvarez no sienten un mínimo de respeto por quienes sufrieron en sus carnes el genocidio nacional-católico, se entretienen viendo las galas de los drag queen desde sus guaridas repletas de santos y cilicios, para luego salir a la palestra criticando, amenazando, lanzando sus patéticas homilías contra quien ejerce el derecho legítimo de expresión y callando vergonzosamente ante los asesinatos fascistas masivos de la institución a la que representan...