Matilde Landa Vaz

Matilde Landa Vaz: Badajoz 1904 – Palma de Mallorca 1942

Pertenecía a una familia acomodada y de tendencia librepensadora que frecuentaba los círculos de la Institución Libre de Enseñanza (ILE) lo que propició que Matilde recibiera una buena formación y educación. En 1923, se traslada a Madrid para estudiar Ciencias Naturales licenciándose en 1929. A mediados de los años 30 trabajó en el Instituto Cajal, como empleada del neurólogo Gonzalo Rodríguez Lafora.

Su militancia política se inicia durante la II República. En 1934 se afilió al Socorro Rojo Internacional (SRI). Ingresó en el PCE a principios de 1936, antes de la guerra.


Ya iniciada la guerra, el 21 de julio de 1936, Matilde es destinada al Hospital Obrero ocupado por el Quinto Regimiento en Madrid, y poco después, al batallón femenino de la misma unidad . Este batallón terminó por disolverse al haber numerosas discrepancias sobre el papel de la mujer en primera línea. A continuación, [] se incorpora a tareas sanitarias en el Hospital Obrero de Maudes. En noviembre de 1936 el hospital fue evacuado debido al avance de las tropas franquistas y Matilde se trasladó en a Valencia para reorganizar el SRI. Dentro de esta organización participó en numerosos departamentos y lugares.


Tras la caída de Barcelona en enero de 1939, se traslada a Madrid siendo designada por el Buró Político del PCE, responsable de reorganizar el partido en la clandestinidad ante la inminente entrada de los rebeldes en la capital. Actuando con el nombre de Elvira organizó la fuga de los dirigentes del partido Domingo Girón, Eugenio Mesón y Guillermo Ascanio, sin embargo, los tres serían detenidos y posteriormente fusilados. Otros militantes comunistas también fueron detenidos en la misma operación, entre ellos Matilde (el 4 de abril de 1939).

El 12 de abril Matilde fue conducida a la sede del Ministerio de Gobernación, estuvo aislada e incomunicada durante casi seis meses.

El 26 de septiembre de 1939 ingresó en la prisión de Ventas. La directora del penal en aquel momento, la teresiana Carmen de Castro, que había sido alumna de la Institución Libre de Enseñanza, permitió a [Matilde organizar una oficina donde realizaría una impresionante tarea de ayuda a las presas condenadas a muerte: un gabinete de asistencia jurídica a las presas que consiguió evitar el fusilamiento de algunas de ellas.

Fue procesada en consejo de guerra el 7 de diciembre de 1939, por adhesión a la rebelión y condenada a pena de muerte, pena que le fue conmutada a treinta años de reclusión el 18 de junio de 1940 gracias a algunos contactos familiares de la ILE.

El 14 de agosto de 1940[] ingresa en la prisión de mujeres de Palma de Mallorca.

Matilde, la única reclusa con formación universitaria, se convirtió en un referente para el resto de las presas, encabezando pequeñas acciones de resistencia. Matilde una mujer culta, inteligente y con gran influencia entre las presas se convirtió en objetivo ejemplarizante de la represión para el resto de las reclusas. No estaba bautizada, esta fue la consigna de las autoridades penales y religiosas, bautizarla. La mejora de las condiciones de vida de las reclusas fueron convertidas en moneda de cambio para conseguir la cristianización de Matilde.

El 14 de septiembre de 1942, doce días antes de morir, se recibe un oficio de la dirección general de prisiones ordenando el traslado de Matilde a la cárcel de mujeres de Santa Cruz de Tenerife, sancionada por su conducta. El traslado fue suspendido días después.


El bautismo público estaba previsto para el 26 de septiembre de 1942, justamente al cumplirse el tercer aniversario desde su ingreso en prisión, al que asistirían el obispo de Palma y el gobernador civil. Pasadas las seis de la tarde de ese mismo día, con 38 años, cayó desde una galería de la prisión. Su agonía duró casi una hora, tiempo suficiente para que se le administrara finalmente el bautismo in articulo mortis. Se apunta como causa más probable el suicidio, inducido por la terrible situación de presión a que estaba siendo sometida por parte de las autoridades penitenciarias y eclesiásticas de la isla para ser bautizada...